Wall Street Journal involucra a Luksic en escándalo Trump

Wall Street Journal involucra a Luksic en escándalo Trump

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El Wall Street Journal publica hoy un reportaje que revela que el empresario es el dueño de la mansión que ha decidido arrendar Ivanka Trump, hija del presidente norteamericano, y su marido Jared Kuschner, mano derecha de Trump en la Casa Blanca.

La polémica radica en que el grupo Luksic tiene demandado al gobierno de Estados Unidos en una disputa por su proyecto minero en Minnesota que tiene un valor potencial de miles de millones de dólares. Y eso, según los analistas, es un potencial conflicto de interés.

Luksic compró la casa a fin del años pasado, después de la sorpresiva victoria de Trump, y pago US$ 5.5 millones de dólares. Según el reportaje, la mansión tiene seis dormitorios y está en el barrio de Kalorama de la capital de EE.UU.

El diario destaca que la familia Luksic es la mas rica de Chile con un patrimonio de US$ 13.300 millones, y que ademas de minería, tiene grandes negocios financieros e industriales.

El reportaje recuerda que en los días finales de la administración de Barak Obama, el gobierno bloqueó el plan de la empresa de construir un enorme proyecto de cobre y nickel, citando preocupaciones medioambientales. Antofagasta Minerals, el grupo minero del la familia, y políticos locales de Minnesota, han estado haciendo lobby con la administración Trump para que revierta la decisión de Obama.

En la nota del WSJ, Rodrigo Terré, parte de la familia y el encargado de administrar parte de la fortuna familiar, explica que la casa la compró como una inversión personal a través de una sociedad inmobiliaria llamada Tracy DC Real Estate. Terré dice que la renta que paga la hija de Trump y su marido es a «precio de mercado» y fue categórico que es una mera coincidencia.

Ademas resaltó que Luksic y los Trump no se han conocido.

Una vocera de la Casa Blanca ratificó que la familia está pagando precio de mercado y que el tema minero no fue parte de la discusión.

Un abogado experto que cita la nota dice que si el precio es efectivamente de mercado, no habría problemas éticos. Pero admite que se ve feo desde el punto de vista político.

Trevor Potter, un abogado republicano, dijo que para él, «el problema está en que la casa nunca estuvo en el mercado y se la ofrecieron a los Trump a última hora.

Terré dijo que él pidió que se avisara a otras agencias inmobiliarias que la casas estaba disponible para arrendar. (El Mostrador)

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