El presidente de Gasco, Matías Pérez Cruz, envío una carta a los trabajadores de la empresa, en la que abordó los posibles impactos que ha tenido para él y la compañía la polémica ocurrida en el lago Ranco.
«Lamento más que nadie que la situación personal en que me vi involucrado y que es de público conocimiento, los haya afectado a Uds. y a nuestra empresa», comienza la misiva el empresario.
En la misiva el presidente del directorio de la compañía energética reiteró que solicitó reunirse «con las vecinas con quien tuve el incidente en presencia de alguna autoridad para disculparme y darnos un saludo en señal de hacer las paces y estoy a la espera de que eso se concrete».
En esa línea, planteó que «he reflexionado con humildad y creo debemos tener buenas relaciones entre los compatriotas, especialmente si son vecinos. Creo que debemos desterrar tanta maledicencia de nuestra sociedad y darle cabida más a la benedicencia. Y en eso quiero contribuir también».
«Mi reacción al verme vulnerado en mi privacidad y la publicación de la grabación de esa conversación privada en RRSS y medios de comunicación se convirtió – cómo era de esperar – en una cadena de ataques personales, amenazas, bulling y funas de todo tipo, -que no han cesado- me han causado mucho daño a mi y a mi familia».
Asimismo, dijo que «como miembro de empresa Gasco y en mi rol de presidente de su directorio les pido tengamos tranquilidad y separemos este episodio mío personal del importante rol de Gasco como una empresa de reconocida reputación y prestigio que ha colaborado por más de 162 años con el desarrollo de la industria de la energía en Chile.
En esa línea, expresó que «los valores y profesionalismo de cada uno de ustedes, que son las personas que forman parte de Gasco, es lo que permitirá seguir trascendiendo en el tiempo como una empresa que genera valor compartido y que es respetada por todos los chilenos». (Emol)
