– «Diría que bajó el interés por el tema». Con estas palabras el ex director del Senda Mariano Montenegro definió el giro que vivió su gestión con la llegada de Mario Fernández a Interior, tras la renuncia de Jorge Burgos a la cartera. El médico psiquiatra de la Universidad de Chile recordó que con Burgos sintió un «enorme apoyo» lo que la permitió elegir a tres de los cuatro jefes de división y a los 15 directores regionales por Alta Dirección Pública.
«En eso el ministro Burgos fue muy respetuoso y muy apoyador en las decisiones que fui tomando», dijo a El Mercurio el también máster en Drogodependencia en la Universidad de Alicante en España. Consultado sobre si perdió respaldo con la salida del ex secretario de Estado y la llegada de Fernández, manifestó: «Diría que bajó el interés por el tema. Tuve un par de reuniones con el ministro actual y no aparece gran interés ni grandes instrucciones». «Cuando se va el ministro Burgos tuve menos conducción desde el ministerio. Porque el Senda pertenece al Ministerio del Interior y depende del ministro. Es un organismo que no depende de una subsecretaría, sino que del ministro. Sin duda, tuve menos conducción y menos instrucción del ministro (Mario) Fernández», añadió.
Montenegro abordó su salida del Senda, horas después de que se conociera que propuso la eliminación de los «happy hours» y barras libres en bares y discotecas.
«Agradezco que me haya elegido director, pero durante un año y medio no tuve una reunión con la Presidenta ni fui convocado para hablar con ella», aseguró el también asesor de la OEA en materia de drogas y considerado uno de los expertos más reconocidos en desintoxicación y adicciones. Asimismo explicó que no pertenece a ningún partido político, y se definió como independiente de centroizquierda. Su falta de militancia, sostiene, no influyó en su salida. Sin embargo, lamentó que nunca le explicaran la razón de su cese en el Senda, según dijo. «A las 13:15 del miércoles me llamó el subsecretario Aleuy para informarme que la Presidenta de la República me solicitaba la renuncia. Le pregunté por qué, y me dijo que más tarde me iba a dar las razones. Nunca hubo una explicación». (Emol)
