Por una hora, el Papa Francisco recibió ayer al ex senador Carlos Ominami, al ex canciller brasileño Celso Amorim y al ex jefe de gabinete argentino Aníbal Fernández en la residencia de Santa Marta.
El grupo pidió al Papa que interceda por la liberación del ex Presidente Lula para que pueda competir en las elecciones en Brasil. «El Papa entiende que lo que está en juego es importante, él siente que hay una utilización de la justicia, y Amorim le dijo que Brasil es un país muy católico y ‘lo que usted, Santo Padre, pueda hacer, tendrá mucha importancia’. Nos dijo que él está preocupado por el tema, y el verá qué puede hacer. Y contó que en una homilía se refirió a cómo se utilizan los medios con falsas noticias que podían terminar en golpes de guante blanco», dijo Ominami. (El Mercurio)
