Evelyn Matthei: «El contralor mintió de forma descarada»

Evelyn Matthei: «El contralor mintió de forma descarada»

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Frontal, Evelyn Matthei despliega su artillería en contra del contralor, Jorge Bermúdez. Reconoce que lo miraba con respeto e incluso con simpatía; que valoraba su trayectoria y que cuando se enteró de que se habían detectado errores en las fórmulas de contabilidad de las municipalidades, pensó que era un error grande, pero solo un error. Fue el despido de tres funcionarios lo que le llamó la atención y empezó a indagar.

Esa indagación despertó la dureza con que Matthei aborda la política cuando las cosas le huelen mal. Y aunque sostiene que no ve una maniobra política en el actuar del contralor, cree que debe renunciar, porque en Chile ya nadie le cree nada.

“El contralor mintió en forma descarada. Mintió dos veces en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados”, sostiene de partida.

¿En qué mintió?

Él señaló que en todos los casos se aplicaba la misma metodología para realizar las auditorías. Eso es total y absolutamente falso. Pídale a cualquier contador auditor que revise la página 41 del informe de la comuna de Lo Prado o la página 10 del informe sobre Estación Central. No hay dudas de que se han usado fórmulas distintas.

“Por ejemplo, la fórmula de la Contraloría Regional de Valparaíso para la comuna de Viña del Mar da un déficit de 17.585 millones. Si usamos la fórmula de la Contraloría de Aysén, el déficit pasa a ser solamente de 400 millones, y si usamos la fórmula de la Región Metropolitana, resulta que la Municipalidad de Viña del Mar tendría un superávit de 5.300 millones. Así de dispares son los resultados”.

-A su juicio, ¿fue error?, ¿fue una manipulación?

-Yo creo que al principio fue un error… Un error inentendible.

-¿Cree, como se ha dicho, que hay una persecución contra los municipios de la UDI?

-No. No creo que haya habido un objetivo de perseguir, pero en los hechos, desgraciadamente, sí perjudicó a los municipios de La Florida y Viña del Mar. No solamente los perjudicó, sino que, además, tuvo consecuencias políticas. En el caso de Viña, poco después de esta auditoría, Beatriz Sánchez anuncia su candidatura. En el caso de La Florida, inhabilitaron durante un mes al alcalde Rodolfo Carter.

-Entonces, ¿sí sospecha de una intencionalidad política?

-No. Hasta hace poco yo pensaba que había un error y que el contralor debió haberlo reconocido. Siempre lo tuve como una persona relativamente seria. No entiendo por qué entró en este juego de esconder, de negar y de mentir. Pero aquí también habría que señalar que los diputados -salvo Jorge Alessandri y Celso Morales- hicieron gala de una frivolidad e ignorancia enormes en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados. Lo peor fue ver a Matías Walker degradar el apellido que sus hermanos han puesto en alto.

-¿Por qué?

-Porque le escuché decir que la Cámara no tenía facultades para investigar a la Contraloría, sino que solo actos de gobierno. Resulta que el mismo Matías Walker votó a favor para hacer una comisión investigadora sobre la compra de terrenos por parte de Rodrigo Ubilla cuando él no tenía ningún cargo de gobierno. ¿Creerá que somos todos tontos?

-El contralor habló de persecución política en su contra y dijo también que él tiene derecho a hacer ajustes en sus equipos…

-Mire, el contralor dijo que Patricio Barra estuvo ocho años y que nunca hizo una denuncia. Falso. Tengo información de que ese funcionario le habría advertido al contralor desde mayo del 2018 que había problemas, y no solo una vez. Entiendo que tiene documentos para probarlo. Quizá por eso los diputados que defienden a Bermúdez no quieren que Patricio Barra vaya al Congreso. Saben que los va a desmentir.

-Este manto de dudas sobre la Contraloría cae en momentos en que se habla de una crisis institucional en Chile. ¿Cómo se sale de esta encrucijada?

-Efectivamente, hemos tenido una avalancha de destrucción institucional por parte de personas irresponsables. Pero hasta ahora, la Contraloría siempre mantuvo su credibilidad. Hoy está puesta en duda. Entiendo que pudo haber habido un error, pero lo que no entiendo es que él haya querido tapar el error mediante mentiras ante el Congreso. A mi juicio, el contralor perdió toda la posibilidad de seguir liderando esa institución.

BLANQUEO DE MENTIRAS

-Acusa a los diputados de “frívolos”. ¿Qué rol cree que debían jugar? Ya se está discutiendo la opción de una comisión investigadora…

-A ver. Lo hicieron en la Comisión de Constitución en que, perdón, pero de contabilidad y de auditoría no saben nada de nada. ¿Cómo no les pidieron ayuda a los colegas de la Comisión de Hacienda? ¿Cómo no se dignaron a escuchar a la otra parte? Porque si no estaban dispuestos a escuchar a las dos partes, lo que hicieron, en realidad, fue un blanqueo de las mentiras del contralor y, además, con argumentos ridículos, como los que señaló el diputado Walker.

-Su alcaldía no está cuestionada. ¿Por qué usted toma esta bandera contra el contralor?

-Yo no he tenido ningún problema con él. Le he tenido admiración, porque se atrevió, por ejemplo, a quitarle la pensión a Myriam Olate. Tuvo coraje. Pero veo que se enredó, que no supo manejar esta situación y salió de la peor forma posible. A estas alturas, no creo que él se pueda mantener en el cargo, porque sencillamente nadie en Chile le cree.

-¿Y cuál es la salida? Si lo que se quiere es reforzar la institucionalidad, hay que resguardar su autonomía, ¿no?

-Yo no soy quién para decir cómo se tiene que resolver este conflicto. Lo único que quiero alertar es que no es posible tener a cargo de la Contraloría General de la República a una persona que miente descaradamente. No es posible.

Montaña de corrupción

-Más allá de la Contraloría, el Presidente advirtió en su cuenta pública los riesgos de una crisis institucional. ¿Cómo fue que llegamos hasta acá?

-Perdón. Desde hace 15 años que vengo diciendo que estamos en una montaña de corrupción. Así que a mí no me pueden decir eso. Yo me agrié el carácter, peleé con todo el mundo, denuncié muchas cosas, me costó un año y medio el poder denunciar el MOP-Gate, porque nadie se lo tomaba en serio. Todo el mundo miraba al techo.

-No se quiso ver…

-No. Lo que pasó es que somos especialistas en hacernos los tontos. Aquí nadie dice las cosas, y cuando uno dice las cosas en forma clara, te apuntan como conflictiva. Decían: “Pero tú sabes que la Evelyn es tan apasionada…”.

-¿Y ahora, hay retorno?

-Tiene que haberlo. Tenemos que agarrar la escoba y barrer todo lo podrido para afuera.

-El tema también tiene que ver con quién lidera el proceso y cuánta legitimidad tiene. ¿El gobierno está en condiciones de hacerlo?

-Es lo que hay. Y veo que el gobierno está bien encaminado en liderar un proceso e invitarlos a todos para que se sienten a conversar.

“Diputaditos” y “senadorcitos”

-En el ámbito político, la legitimidad también la da la aprobación o el rechazo ciudadano. El gobierno ha sufrido un castigo en ese sentido…

-El gobierno va a aumentar su aprobación. El crecimiento de la economía ha estado muchísimo mejor que los dos últimos años del gobierno de Bachelet. Lo que sucede es que, en los ciclos económicos, lo último que se recupera es el empleo. Estamos en una etapa en que la gente no está percibiendo una mejora en el mercado laboral, pero este anuncio de potenciar las obras de infraestructura va a mover la economía y el empleo.

-Usted sabe de política. A Piñera lo van a medir por las cifras económicas. Ahí estaban cifradas las expectativas…

-Totalmente, pero hay que ser muy ‘cara de palo’ de criticar al gobierno porque la economía no está creciendo y, al mismo tiempo, los “diputaditos” y los “senadorcitos” se niegan a cambiar la pésima reforma tributaria que ellos hicieron y que tiene trabada la economía.

-¿Y qué pasa con la ciudadanía? ¿No es un costo que ellos se sientan frustrados por la promesa de tiempos mejores?

-Probablemente nunca se dijo claramente que los tiempos mejores no se dan de un día para otro. Pero la ciudadanía va a empezar a percibir ese cambio en la medida en que en el Congreso prime el bien común y no el deseo de que al gobierno le vaya mal. Por ejemplo, la reforma de las pensiones va a ser un alivio directo para muchísima gente de la clase media que hoy lo está pasando muy mal.

-¿El gobierno tiene capacidad política para empujar esas reforma o se requiere cambio de gabinete?

-En ese tema no me voy a meter, porque no me corresponde.

«LAVÍN VA A GANAR POR WALK OVER»

-¿No teme que lo afecte tempranamente el síndrome del “pato cojo”? Allamand ya abrió la carrera.

-No creo que haya síndrome del ‘pato cojo’. La razón por la cual Andrés Allamand anuncia candidatura es porque en RN hay varios otros candidatos posibles, como Ossandón y Chahuán. Todos quieren ser, pero tienen a un Joaquín Lavín totalmente disparado y ellos tres marcan poco. Dentro de RN sienten que, si no se lanzan pronto, sencillamente Lavín va a ganar por walk over.

-¿Y usted lo ve así también?

-Sí.

-¿Qué tiene Lavín a su favor?

-Las encuestas.

-Me refiero a qué hace que Lavín logre ese enganche con la gente.

-Lavín es un genio comunicacional. Un genio. Pocas veces he visto a alguien más genial para entender lo que la ciudadanía anhela, le duele o lo indigna. De verdad, pocas veces he visto a alguien con tanta capacidad para captar el sentir de la gente y hacer cosas concretas que demuestren que él se preocupa.

-¿Es el “cosismo” que le critican?

-Yo creo que lo critican de pura envidia. Al final, mira dónde está Lavín.

-Digamos que su apuesta es Lavín candidato.

-Bueno, si las cosas fueran mañana, no es una apuesta, es una realidad.

-¿Qué errores no debiera repetir Piñera para no perder nuevamente en la presidencial?

-No solamente Piñera. Los ministros, los subsecretarios, los gobernadores, los contralores, la Corte Suprema y de Apelaciones, los generales, los municipios, todos debiéramos entender que esta sociedad está cambiando. Y que lo que hace 15 años era normal y aceptable, hoy en día es un escándalo.

-¿Por eso la palabra “patipelado” cayó mal?

-Obviamente. Uno tiene que cuidar todas las acciones, todos los dichos. Acá tiene que operar de verdad la meritocracia. No pueden ser puros niñitos de colegios privados los que están en puestos altos. No pueden ser todos de la Universidad Católica y de la Chile. Se requiere incluir gente de otros mundos, que hayan tenido otras experiencias. No puede ser que solo sean los que se han criado entre La Dehesa, Vitacura, Cachagua y Pucón. Ese es un tema fundamental y no lo han entendido.

-¿Esa es una herida para el gobierno? La encuesta Criteria sostiene que la gente castigó al gobierno por el viaje a China de sus hijos y porque, dicen, se gobierna para unos pocos…

-El Presidente Piñera es muy inteligente. Yo creo que entiende perfectamente hacia dónde van los aires. (La Tercera)

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