Eugenio Tironi asegura que el último cambio de gabinete fue una «reestructuración» tan importante que podríamos hablar de un «retorno al aylwinismo».
«Con una figura predominante que es Jorge Burgos, con mucha experiencia parlamentaria y mucha sabiduría política; a quien se suma Rodrigo Valdés, el primer ministro de Hacienda, desde los 90, que viene del mundo real y el mundo de la empresa; un ministro de Segpres, Nicolás Eyzaguirre, que tiene muy fuertes credenciales económicas, muy pro crecimiento, alguien que fue muy leal, pero también muy critico de como se hicieron las cosas en 2014; y un ministro secretario general de Gobierno, Marcelo Díaz, con experiencia parlamentaria y fuerza en el PS», declara el sociólogo a El Pulso.
En ese sentido, dice que con estos nuevos rostros en La Moneda más que un cambio de gabinete constituye «un cambio de Gobierno» e incluso «es como el retorno al aylwinismo».
Para el consultor, con el cambio de gabinete se cambió el foco de atención: «De igualdad se pasó a crecimiento y es notable como ha logrado Rodrigo Valdés en tan pocas semanas cambiar el eje, bajando expectativas y tratando de contener la idea de nuevas reformas».
Asimismo, advierte que el Ejecutivo cambió la forma de enfrentar los problemas, «ya no se trata de expliquemos mejor lo que hacemos, sino que sinceremos respecto de los límites».
«Estamos pasando de un hiperpresidencialismo y exclusión de partidos a un gobierno mucho más colegiado, parecido al Gobierno de Aylwin», concluye.
