Pese a que la Conaf había sido reticente a aceptarlo, la acción del SuperTanker, que ayer descargó 70 mil litros de agua en Hualañé, dejó contentos a los bomberos, a los lugareños y convenció a las más escépticas autoridades. Según el alcalde de la zona las llamas se redujeron en un 70% luego de la acción del vehículo donado por la chilena Lucy Avilés.
Un grupo de vecinos que vieron la acción del avión, captaron el momento exacto en el que este hizo la descarga de agua sobre la zona afectada. En la grabación se alcanza a escuchar sus gritos de felicidad. “!¿Quién dijo que no se podía?!”, dice uno en alusión al director de Conaf, que dos días antes había asegurado que los aviones grandes no servían para combatir incendios en Chile. (El Dínamo)
