El ministro de Finanzas ucraniano hizo un llamado por ayuda financiera inmediata de decenas de miles de millones de dólares para remediar el enorme déficit fiscal causado por la invasión rusa.
El gasto público superó a los ingresos en unos US$ 2.700 millones en marzo, y Ucrania espera que la brecha se amplíe a entre US$ 5 mil y US$ 7 mil millones a mayo a causa de la guerra. El PIB de Ucrania ascendía a US$ 164 mil millones en 2021.
«Estamos bajo un gran estrés, en la peor condición (financiera)», dijo Sergii Marchenko en entrevista con FT. «Ahora se trata de la supervivencia de nuestro país».
Mientras tanto, los indicios de que Rusia se acerca a una nueva e importante ofensiva en el este de Ucrania se han incrementado, con los funcionarios de Defensa estadounidenses reportando que las tropas retiradas de Kiev y sus alrededores están siendo reabastecidas y reforzadas por el Kremlin para un nuevo despliegue en la región del Donbás.
Si bien las autoridades ucranianas ya han informado de la intensificación de los bombardeos rusos en la región -incluyendo el ataque de la semana pasada a la estación ferroviaria de Kamatorsk donde murieron más de 50 civiles-, un alto funcionario del Pentágono dijo que EEUU no cree que haya «comenzado una nueva ofensiva».
A medida que los civiles huyen del país, las fuerzas ucranianas y rusas se mueven en la otra dirección al converger en el Donbás para lo que amenaza con ser el combate más sangriento de un guerra que ya está en su séptima semana.
