No lo dijo en serio. Al menos esa fue la justificación que dio el diputado socialista Marcelo Schilling al intentar explicar sus dichos de ayer jueves cuando planteó la posibilidad de «expropiar» la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) si ésta se negaba a cumplir la ley en caso de aprobarse el proyecto sobre aborto terapéutico.
«Lo dije medio en broma. Voy a empezar a retirar las bromas porque este país está demasiado grave«, dijo el parlamentario PS a CNN Chile, matizando sus dichos iniciales emitidos en una entrevista con Radio Valparaíso.
Las declaraciones de Schilling sobre una eventual expropiación provocaron controversia, al punto que elpropio rector de la PUC, Ignacio Sánchez, aseguró que «sus palabras increíblemente intolerantes y totalitarias».
En sus dichos iniciales, el diputado PS reprochó el rechazo de la jerarquía católica al proyecto de ley de aborto, señalando que «las leyes aquí son de validez general» y hay que velar por el «interés superior». «Quiero decirle al rector de la UC, a los directores de las clínicas y al arzobispo de San Bernardo también administra un hospital, que así como los parlamentarios no están sobre la ley, los curitas y las universidades tampoco», indicó. (La Nación)
