Nuevamente debió ir a tribunales el mayor Humberto Tapia Zenteno (44), de la 4° Comisaría de Carabineros, para enfrentar una audiencia de formalización por hechos ocurridos desde el estallido de la crisis social.
La primera de ellas ocurrió a comienzos de octubre, cuando le sindicó como responsable de los disparos ocurridos al interior del Liceo 7, los que hirieron a dos estudiantes de 17 años.
En dicha oportunidad, se decretó su arresto domiciliario nocturno, prohibición de acercarse a las afectadas por el delito de apremio ilegítimo, mientras que la jueza que dirigió la audiencia tildó el hecho de «abuso».
Ya hoy, la fiscal Centro Norte, Ximena Chong, le imputó el delito de homicidio frustrado por un hecho ocurrido antes, el 19 de octubre, día en que se había decretado toque de queda.
De acuerdo a la persecutora, a eso de las 23:30, el menor, de iniciales K.F.M.C. (16), que se encontraba en su domicilio, salió al exterior, lugar donde se llevaba a cabo una manifestación. Posteriormente, carabineros lanzó bombas lacrimógenas, mientras que K.F.M.C. volvió al edificio.
Chong indicó que Tapia y otro policía entraron al lugar, oportunidad en que el primero le disparó por la espalda con su escopeta antidisturbios, «sin que medie situación de flagrancia que amerite».
El joven, de entonces 16 años, recibió siete perdigones de los 12 que contiene una munición. Por ello, el Ministerio Público solicitó su prisión preventiva, petición a la que accedió el tribunal.
«Nosotros estamos tranquilos con la decisión, creemos que se acogieron los argumentos del Ministerio Público, principalmente referidos tanto a los antecedentes que configuran la existencia de los hechos como de la participación del imputado y también al nivel de la prisión preventiva los antecedentes que esgrimimos a propósito del peligro para la sociedad y el peligro para la investigación que podía presentar la libertad del imputado. En ese sentido, la resolución nos parece sólida y respalda el trabajo que hemos hecho hasta ahora en conjunto con la brigada de derechos humanos», señaló la fiscal Chong.
Asimismo, añadió que «los elementos más claves en este caso es que los videos dan cuenta de que no existe ningún tipo de agresión inminente que justifique la utilización de un armamento. Se encuentra establecido además que era la única persona que portaba armamento menos letal, se encuentra acreditado que realizó disparos dentro del lugar, y además no hubo ninguna precaución en torno a determinar el estado de salud del adolescente lesionado, ni se prestaron socorros oportunos». (Emol)