Los enfrentamientos armados en la ex Birmania comienzan a aparecer a más de dos meses del golpe de Estado. La policía lanzó este viernes artefactos explosivos en contra de civiles, causando muertos en Bago. Por esa razón los ejércitos étnicos realizaron un ataque este sábado en contra de agentes de seguridad.
Los medios y testigos aseguran que la acción militar provocó unas 80 víctimas en esa ciudad. Esa ofensiva contra la ciudadanía provocó el ataque rebelde que dejó 14 policías fallecidos. La acción dejó al menos cinco oficiales heridos y dos desaparecidos en el estado Shan, según el sitio web Irrawaddy.
La ofensiva contra las fuerzas de la dictadura fue lanzado por grupos rebeldes. Entre ellos están el Ejército Arakan, el Ejército de Liberación Ta’ang y el Ejército Nacional de la Alianza Democrática. Se trata de guerrillas étnicas que en marzo dieron un ultimátum a la junta militar por la represión.
Ninguno de los grupos reivindicó la ofensiva, pero firmaron un comunicado en el que advertían al ejército. En el texto los llamaban a detener sus acciones violentas y satisfacer las demandas de la población. Los grupos dijeron colaborarán con las protestas de la “Revolución de la primavera”.
Reuters detalla que al menos 618 personas fueron asesinadas durante la represión contra las protestas. Las cifras fueron verificados por la Asociación para la Asistencia de Presos Políticos. La organización advierte que el número puede incrementarse ante la dificultad para corroborar los hechos.
El vocero de la junta golpista, Zaw Min Tun, dijo el viernes que el ejército registraba 248 muertes de civiles y 16 policías. El militar aseguró que las fuerzas de seguridad no utilizan armas automáticas. La violencia no detuvo a los manifestantes que volvieron a protestar en diferentes ciudades. (ADN Agencias)
