Los ex Presidentes Ricardo Lagos y Eduardo Frei fueron las primeras figuras políticas recibidas por la Jefa de Estado, Michelle Bachelet, para dar inicio a las conversaciones que buscarán lograr un acuerdo transversal que modifique el actual sistema de pensiones.

Ambos ex Mandatarios llegaron ayer juntos hasta el Palacio de La Moneda donde sostuvieron una reunión que se extendió por poco más de una hora en el salón de audiencias de la Jefa de Estado.

Al término de la cita, ambos celebraron el llamado de la Presidenta a realizar un gran acuerdo en esta materia.

“Es muy importante en este momento en que ha habido un clima permanente de desconfianza y descalificaciones en el país, que haya un espacio para entenderse sobre temas de país y que trasciendan un gobierno”, declaró ayer el ex Presidente Frei.

Por su parte, Lagos aseguró que el país debía sentir satisfacción “por el llamado hecho por la Presidenta a los distintos sectores, para abordar este tema con altura de miras”. Junto a esto, el ex Presidente agregó: “Es cierto, no es todo lo que puede ser, pero es un paso importante y significativo”.

La decisión de sumarse al debate respecto de las AFP es visto en la Nueva Mayoría como una buena opción para que la Mandataria pueda repuntar en las encuestas, las que por estos días la ubican en cifras de aprobación de sólo un 20%.  Esto, a pesar de que en La Moneda insisten en que los anuncios de la Mandataria responden a la “urgencia” planteada por la ciudadanía y la clase política, a pesar de que aún quedan pendientes procesos complejos y comprometidos en el programa de gobierno, como la reforma educacional.

El diagnóstico del oficialismo es apoyado por el sociólogo Eugenio Tironi, quien asegura que la celeridad con la que respondió la Presidenta al llamado de la opinión pública puede ser positivo para la imagen del Ejecutivo.

“La reforma previsional puede ser para este gobierno una causa unificadora. Y si la Presidenta se pone delante de esto puede ser bueno para ella y para el país”, aseguró.

En esta línea, el ex asesor de los gobiernos de la Concertación agregó: “Esto no se planteó de manera dogmática, sino que se planteó la necesidad de hacerlo con pausa, escuchando a todos los actores. Este diseño es la anti-reforma tributaria y la anti-retroexcavadora”.

Similar diagnóstico planteó el cientista político Kenneth Bunker, quien asegura que es clave el llamado de la Mandataria a realizar un acuerdo transversal: “Eso es lo que la gente esperaba, la gente quiere ver que los políticos se pueden poner de acuerdo en tiempos de dificultad”.

Además de hacer un llamado de unidad para hacerse cargo de este conflicto, el anuncio de la Presidenta Bachelet apunta a realizar mejoras justamente en un tema que significó aumentos significativos en las cifras de aprobación durante su primer gobierno: la reforma previsional realizada en 2008.

“Si hay alguien en Chile que puede dar confianza respecto a mejorar el sistema de pensiones es la Presidenta Bachelet. No hay que olvidar que esa reforma fue clave en su primer gobierno”, aseguró el analista político de la UDP, Mauricio Morales, quien además agregó: “Ella debe recordarle a los chilenos que, a pesar de todos los tropiezos, el sistema de pensiones mejoró bajo su administración y que ahora redoblará los esfuerzos. Esto debiera reflejarse en un incremento en el apoyo de las mujeres y de los más pobres”.

Junto a esto, Morales destaca que los apoyos transversales que generan este tema en el oficialismo puede ser positivo también a nivel político: “Su ventaja en este caso es que el “No a las AFP” es una demanda transversal en la Nueva Mayoría. Es de los pocos temas que concita cierto consenso y que, además, es congruente con la demanda ciudadana”, aseguró.