Preocupados por un nuevo foco de conflicto se encuentran en Televisión Nacional (TVN). El directorio presidido por Bruno Baranda no sólo se aboca a disminuir la mochila de deudas, sino que también enfrenta un complejo escenario en materia laboral.
Se trata del nuevo proceso de negociación colectiva que deberá llevar adelante el canal en 2019 con los tres sindicatos internos, involucrando a más del 80% del total de sus trabajadores. Tras dos periodos de masivos despidos -que redujo 119 puestos de trabajo-, la planta, desde noviembre pasado, es de 978 personas.
Tal es la preocupación que genera el proceso de negociación colectiva que el pasado 6 de diciembre, la gerente general de TVN, Alicia Zaldívar acompañada del abogado laboral, Luis Lizama se reunió con el Director del Trabajo, Mauricio Peñaloza, por la nueva fase de conversaciones con sus funcionarios que establecerá nuevas condiciones comunes de trabajo y de remuneraciones.
En la cita, cuyo registro quedó en evidencia en el Portal de Ley de Lobby, la ejecutiva explicó que la solicitud tuvo por objeto “aclarar la situación en la que se encuentra Televisión Nacional de Chile frente al próximo proceso de negociación colectiva a la luz de la denegación total de los servicios mínimos solicitados por la empresa”. En concreto, en la audiencia solicitada se buscó “aclarar personalmente al Director Nacional del Trabajo las consecuencias de una eventual huelga a nivel nacional y sus efectos en el interés público”.
¿Por qué TVN pide se le consideren servicios mínimos? Según trascendió el objetivo es garantizar que el canal “no se vaya a negro”. Es decir, que se vea imposibilitado técnicamente de emitir su señal y aunque parezca coloquial es sumamente relevante. Ello debido a un tema legal, pues si la empresa no emite la señal, la concesión puede ser incluso caducada por el Estado.
Es decir, a la fecha existe un choque de dos legislaciones: una que establece el derecho a huelga y otra que establece que si la empresa no emite su señal podría perder su concesión.
Por otro lado, todos los canales requieren subir su señal al satélite. Una eventual huelga, que impida dicho proceso dejaría sin esta posibilidad no sólo a TVN, sino que también a otros canales que podrían verse afectados por similares manifestaciones. Ello entenido como un prescedente que alerta a la industria de la televisión.
Y por último, al estar sujeto al deber de informar a la población, el canal exige un grupo de periodistas y técnicos que en prensa pueda emitir un noticiario al día y la posibilidad de tener cobertura en caso de catástrofe nacional, como un terremoto.
En caso de ser rechazada nuevamente su petición ante el Director Nacional del Trabajo, TVN puede acudir a ante un Juez del Trabajo y solicitar la anulación de la decisión de la autoridad.
En junio pasado, TVN realizó una presentación en la que expuso sus servicios mínimos. Frente a la primera denegación que realizó la Dirección Regional del Trabajo Metropolitano Oriente; vía ley de Transparencia, Zaldívar solicitó la reunión para que la Dirección Nacional del Trabajo reconsiderara dicha decisión. No sólo por la emisión al aire del canal, sino que también por los equipos que hacen andar el canal que requieren una atención las 24 horas y los siete días de la semana y que no pueden quedar solos.
El origen del conflicto
Según trascendió, TVN solicitó la calificación de servicios mínimos para 40 trabajadores. Ante ello, las tres directivas sindicales consideraron que era un exceso, pues –a juicio de ellos– no debe existir esta calificación.
Este proceso debió haber quedado definido -según los plazos que estiman los trabajadores- al menos a mediados de diciembre. Sin embargo, los tiempos se han seguido extendiendo.
Frente a la indefinición, y medio de una marejada de despidos, dos de los tres sindicatos acudieron a la justicia y por medio de un recurso de protección trataron de activar la negociación colectiva para blindar a sus afiliados con fuero sindical y evitar que sean despedidos.
Por lo mismo, dos de los tres sindicatos que confirman el personal de planta de TVN presentaron un recurso de protección en contra de la Inspección comunal del Trabajo de Providencia, a fin de que se acelere este proceso y se inicie en forma inmediata la negociación colectiva que debía comenzar el pasado 16 de octubre de 2018. El recurso de protección es patrocinado por la ex ministra del Trabajo, Alejandra Krauss y Joaquín Cabrera, ex Jefe del Departamento de Relaciones Laborales de la Dirección del Trabajo.
La causa se iba a alegar hoy durante la mañana en la undécima sala del tribunal de alzada. Sin embargo, el pasado viernes la abogada Krauss solicitó su suspensión.
A cargo de la defensa de TVN se encuentra la abogada Alejandra Novoa, quien forma parte del estudio de abogados Lizama & Cia.
La Tercera/Agencias
