Un total de 277.842 cajas de alimentos se han repartido a lo largo del país desde que el pasado 22 de mayo se inició la campaña «Alimentos para Chile» que impulsa el Gobierno, y con la cual busca ayudar a las familias más vulnerables para enfrentar la crisis sanitaria.
Así lo informó la ministra vocera de La Moneda, Karla Rubilar, quien detalló que de estas 226.666 se han entregado en la Región Metropolitana y 51.176 en Arica, Tarapacá, Antofagasta, Valparaíso, Biobío, La Araucanía y Los Lagos.
Según la secretaria de Estado, esto se ha logrado «con el trabajo mancomunado de los dirigentes sociales, de los alcaldes, de los funcionarios municipales y también de los funcionarios de Gobierno.
Y las estimaciones del Ejecutivo señalan que estas ayudas permiten llegar a las familias «con la misma cantidad de dinero, con más implementos, con más elementos, con más bienes esenciales, como son los alimentos no perecibles y de higiene que lo podría cualquier familia comprar si hubiésemos depositado una cantidad determinada de recursos».
Asimismo Rubilar aseguró que en regiones se están comprando los productos a emprendedores locales «y con eso estamos reactivando la economía local».
Aprovechamiento político Al hacer el recuento de las canastas entregadas hasta ahora, la titular de la Segegob respondió a las críticas que se le han hecho al Gobierno apuntando a un «aprovechamiento político», por la forma en que estas se han entregado. Ya que se ha cuestionado particularmente el despliegue mediático y de personalidades del Ejecutivo que han ido a repartir las cajas a las familias.
Rubilar aseguró que participar de estas entregas «ha sido una experiencia maravillosa». «El poder estar en terreno entregando estas canastas familiares y ver la alegría, la esperanza, de esas familias que valoran este aporte. Sabemos que no es la solución como lo ha dicho el Presidente, pero por Dios que ayuda. Es un apoyo en momentos duros, la gente valora la canasta de alimentos, la agradece y lo cierto es que nosotros hacemos una invitación a la oposición a sumarse a lo que finalmente ayuda a las personas que más lo requieren», sostuvo.
En esa línea la ministra pidió «menos crítica y más acción, menos crítica y más grandeza, menos crítica y más soluciones, menos crítica y más aportes. Ese es el llamado que hacemos en momentos difíciles para todos los chilenos y para todas las chilenas. Así que nuestra invitación es abierta, es a ayudar, porque ninguna crítica nos va a alejar como Gobierno de nuestra principal labor, que es estar en terreno aportar, ayudar, buscar soluciones, escuchar y finalmente tratar de solucionar los problemas de los chilenos». (Emol)
