Gbno. y Espacio Público traban polémica por número de muertes Covid19

Gbno. y Espacio Público traban polémica por número de muertes Covid19

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«La información de fallecidos es absolutamente transparente, es pública. Valoro el esfuerzo de estudio que hace Espacio Público, pero insisto: es imprescindible hacer estos cálculos en una forma correcta, y esa forma correcta es ajustando por la población, porque si uno compara el año actual con diez años atrás, estamos hablando de diferencias de varios miles de personas, incluso con el promedio de los últimos cinco años, que parece que es la base que usa el informe«.

Así respondió este jueves el ministro de Salud, Jaime Mañalich, a un nuevo cuestionamiento en torno a la cifra de fallecidos atribuibles a coronavirus dentro del país. Luego del reportaje publicado por Ciper, hoy se sumó un estudio de Espacio Público que estima que durante abril y mayo se habrían generado 712 muertes que se podrían relacionar al virus y que no se corresponden con los conteos del Minsal.

El estudio basa su reporte sobre las «muertes en exceso» entendiéndolas como «las muertes extras que se observan el año 2020 en semanas con la epidemia avanzada, en comparación con una proyección de lo que se esperaría sin la pandemia», considerando «la historia semanal de fallecidos de los últimos siete años».

Para la proyección, «se estiman modelos con datos desde el 2013 hasta el 1 de abril de 2020, y se estima cuántos fallecimientos habrían en un contexto sin pandemia para las semanas que van del 2 de abril al 27 de mayo».

El ministro echó por tierra esta proyección señalando que «la diferencia de fallecidos entre el año pasado —ajustada por población, como tasa de mortalidad, no como números absolutos, porque calcularlo de esa manera es un error, ya que la población en Chile entre abril del año pasado y abril de este año aumentó más o menos en 200 mil personas— calculado como corresponde, ajustado por población, nosotros tenemos que el exceso de fallecidos es 811 y a la fecha de este informe nosotros habíamos notificado como fallecidos 825″.

«Yo me estoy tratando de comunicar, no he podido todavía, por teléfono con el director de Espacio Público para tratar de aclarar este informe y, de acuerdo a lo que pueda conversar con él, tratar de dar más elementos, pero insisto: a nosotros, que revisamos este informe por lo serio de su fuente, nos parece que el número de fallecidos que aparecen como desconocidos o atribuibles a coronavirus no se ajusta a la realidad», insistió Mañalich.

Luego de que se le señalara que el criterio de comparación no era de hace diez o cinco años, sino que lo que se esperaba para este según una proyección, el titular de Salud enfatizó en que las 712 muertes extra no le parecían posibles. «No veo manera de que eso ocurra. Evidentemente no existe un número así de personas que puedan registrarse como asociadas a covid», respondió.

Los datos del informe fueron solicitados a Espacio Público por el consejo asesor del Minsal. Al respecto, el ex ministro y miembro de la instancia, Álvaro Erazo, señaló que «lo peor es quedarse con la duda».

RESPUESTA DE ESPACIO PÚBLICO
«Lo que dijo el ministro, si entiendo bien, es que no corregimos porque la población está creciendo. El ministro está equivocado: sí corregimos por todas esas cosas. Es un estudio serio. Creo que es importante que el ministro no mate al mensajero, sino que escuche el mensaje y no vuelva a cometer el error que cometió en el pasado».

Así comienza sus descargos el director de Espacio Público, Eduardo Engel, luego de la polémica que generó el estudio que publicaron este jueves. En él, se muestra que existen 712 «muertes en exceso» en abril y mayo, semanas donde el avance del covid-19 ya era mayor. El cálculo se realizó «en comparación con una proyección de lo que se esperaría sin la pandemia».

Ahí es donde hubo conflicto: según el ministro, el ejercicio no está calculado «de forma correcta». Pero las palabras del ministro, según explica Engel, no hacen referencia de forma precisa a la metodología del estudio, que no compara las muertes de hace diez ni cinco años, sino que considera la «historia semanal de fallecidos de los últimos siete años», según se explica en el documento.

En la proyección se estudia más de un modelo «con datos desde el 2013 hasta el 1 de abril de 2020, y se estima cuántos fallecimientos habrían en un contexto sin pandemia para las semanas que van del 2 de abril al 27 de mayo». «La proyección incluye una tasa de crecimiento que estima el modelo para cada región, y esa tasa captura el crecimiento de la población», explica Engel.

«Yo creo que el ministro no tiene por qué sentarse a leer nuestro estudio, pero sus asesores sí deberían darse el tiempo de leerlo. Es un estudio sólido, con metodología robusta, con dos aproximaciones distintas que han resultado muy parecidas, de modo que el tema no es el estudio: es cómo interpretamos esos resultados para llegar a las conclusiones correctas», asegura. »

Engel asegura que su teléfono está disponible. «Yo le he mandado whatsapps y estoy esperando su llamada para explicar aquellas cosas que pudo no haber entendido de nuestro estudios, porque las afirmaciones que hace son equivocadas», asegura.

Lo que advierte el economista es que vale la pena seguir investigando en base a lo que muestra el estudio: no quiere decir que las 712 muertes hayan sido de personas que contrajeron el nuevo coronavirus, sino que detrás de esa cifra hay más de un factor que puede estar incidiendo.

«El primer tema, que es el que ya ha sido resaltado por fuentes periodísticas y otros analistas, tendría que ver con que hay certificados de defunción que indican covid y que no son contabilizados por el Gobierno«, explica el director.

En ese sentido, Ciper dio a conocer que la diferencia entre las cifras del Minsal y el número de certificados de defunción que contenían covid-19 entre las causas de muerte en el Registro Civil era de 63 casos. Además, contabilizó 316 actas en las que se indica «sospecha» de coronavirus.

«Hay gente que no se contabiliza pero que sí murió de covid», asegura Engel. «Hay todo un tema con la gente que muere en su casa, que no se hace el PCR. Con el método antiguo, la mayoría no se contabilizaba como covid, entonces ahí hay un tema adicional. Ese es un factor muy importante y está en el Gobierno corregir la estadística retroactivamente, para ver qué parte de esas 712 muertes se deben a ese factor, tienen que hacer una investigación cuidadosa», señala.

Se trata de un trabajo que el Minsal se ha mostrado dispuesto a hacer, si así lo dictamina la Contraloría General de la República. El viernes pasado, el ministro encargó a esta entidad auditar todas las fuentes de información que se utilizan para elaborar las estadísticas para que «garantice, evalúe y corrija, si es el caso». Ese sería, según Engel, el primer factor a abordar.

MUERTES «INDIRECTAS»

El impacto del coronavirus en los decesos también puede ser colateral, señala el economista. «Hay un segundo elemento, que son las muertes indirectas por covid, como se les llama en la literatura. Estas pueden ser personas que mueren por otra enfermedad que no es tratada oportunamente porque la gente no está yendo al hospital», expone.

«En estos momentos, los hospitales chilenos están muy cerca del colapso y es muy, muy importante ver cómo el sistema de salud también se está preocupando de otras enfermedades claves que llevan a que gente se muera, porque la gente no solamente se muere por covid, sino porque no se atiende a tiempo un infarto cardiaco, uno cerebral, algún otro tipo de afecciones que también llevan a decesos«, dice.

«Por lo tanto, una estrategia sanitaria que combine el manejo de covid con estas otras causas, al menos una vez que esté ya más controlada la epidemia, es también un elemento clave de la política pública».

En ese sentido, Engel celebra lo que el ministro mencionó esta mañana. «Me parece muy positivo que las estadísticas que publica el Minsal a través del DEIS (Departamento de Estadísticas e Información de Salud), que habitualmente demoran más de un año, se vayan a hacer públicas rápidamente. Celebro que haya anunciado que transparentará y hará públicos no solamente el número de defunciones, sino también las causas. Con eso vamos a poder ver qué está pasando», acota.

«Más aún, yo invitaría al ministro a que, si el DEIS no puede procesar rápidamente eso, simplemente se publiquen —obviamente innominados— los certificados de defunción». El tercer factor, explica, funciona «en la dirección contraria»: no explica el aumento de muertes, sino que puede incidir en el total por la reducción de otras causas de defunción.

«Según los datos que ha publicado la Conaset, vemos que los fines de semana largos que han habido durante la pandemia, las muertes por accidentes de tránsito han bajado en Chile. En otros países hemos visto ciudades en cuarentena donde los homicidios han bajado», expone. «En los tres casos, el peso de la prueba es del Gobierno, porque ellos tienen los datos», concluye. (Emol)

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