Pasadas las 7:00 de este viernes, alrededor de 100 mujeres iniciaron una toma feminista de la casa central de la Universidad Católica en Santiago.
Las manifestantes, que llegaron encapuchadas al lugar cerrando los ingresos con candados y cadenas, buscan que la dirección de la casa de estudios se haga cargo de las denuncias internas sobre acoso y abuso sexual.
Daniela Pinto, una de las manifestantes, comentó a La Radio que la toma se decidió luego que el rector Ignacio Sánchez no se reuniera ayer jueves con mujeres que buscaban entregarle un petitorio sobre la materia.
Dicho petitorio tiene diez puntos, que busca entre otras cosas establecer una educación no sexista y que exista un protocolo de abuso y violencia de genero que responda a las demandas estudiantiles.