Detenido ex canciller de Arzobispado por 7 casos de abuso sexual

Detenido ex canciller de Arzobispado por 7 casos de abuso sexual

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En agosto del año 2003, Óscar Muñoz Toledo (56) fue designado vicecanciller del Arzobispado de Santiago y asumió así como uno de las figuras más cercanas al obispo de la época Francisco Javier Errázuriz Ossa. Cuando en 2011, Errázuriz Ossa fue sucedido por Ricardo Ezzati, Muñoz Toledo ascendió a canciller y, en esta calidad, estuvo presente en algunas de las declaraciones que realizaron los afectados por los abusos sexuales y de conciencia del sacerdote Fernando Karadima.

Muñoz Toledo conoció en ese minuto la impotencia y el dolor de las víctimas. La otra cara, la del acusado de abusos, ya en ese entonces no le era ajena. Según la información recabada por el fiscal Regional de Rancagua, Emiliano Arias, tras revisar los documentos incautados del Tribunal Eclesiástico de Santiago y el archivo secreto del presbítero en el Arzobispado, existe constancia desde el año 2002 y hasta marzo de este año de abusos sexuales y estupro contra menores de edad por parte de Muñoz Toledo. Hasta el momento, existen 7 víctimas, que cuando ocurrieron los hechos tenían entre 11 y 17 años, cuyos testimonios estaban en conocimiento de las autoridades de la Iglesia y que reivindicaron sus declaraciones ante el Ministerio Público.

Por este motivo, y con la existencia además de pruebas realizadas por el Servicio Médico Legal, Arias concretó esta jornada –según confirmó La Tercera PM-  la detención de quien detentó uno de los más altos cargos en la Iglesia chilena y que hasta hoy figuraba libre, tras autodenunciarse recién a inicios de este año por un caso de abuso, en su casa en Macul. Los cargos imputados son abuso sexual y estupro reiterado.

HOMBRE DE DIOS

En la página web de la parroquia Jesús de Nazareth de Estación Central, donde Muñoz Toledo ejercía como sacerdote hasta que reconoció el 2 de enero haber vulnerado a un menor de edad, figura aún la descripción de cuando el párroco asumió el 6 de marzo de 2016.

Allí se reseña que una eucaristía presidida por Monseñor Galo Fernández V., obispo auxiliar de Santiago y Vicario de la Zona Oeste,  “tomó posesión de la Parroquia, nuestro nuevo párroco, Pbro. Oscar Muñoz Toledo, quien fue acogido calurosamente por la comunidad parroquial. El padre Oscar Muñoz Toledo, fue ordenado sacerdote el 3 de junio de 2000 y proviene como párroco de la Parroquia Inmaculada Concepción de Maipú y se desempeña además como Canciller del Arzobispado de Santiago. Junto a su familia y fieles, el padre Oscar agradeció a la comunidad esta acogida y animó a los asistentes a seguir avanzando en el camino de construir y edificar la Iglesia a partir del amor y la misericordia”.

No todo el núcleo familiar de Muñoz Toledo asistió a esta ceremonia: cinco de sus sobrinos, hijos de primos hermanos del religioso, figuran entre sus víctimas. Otro corresponde a uno de sus acólitos. Un séptimo denunciante fue abusado en el año 2004 en Rancagua, lo que le permitió a Arias solicitar la orden de detención en el tribunal de esta ciudad.

El patrón de conducta es similar al de otros victimarios: se ganaba la confianza de los niños, se convertía en su confesor, posteriormente les realizaba tocaciones, pedía que lo masturbaran y en al menos un caso hubo acceso carnal. Existen, además, otras tres denuncias de actuaciones sórdidas: el religioso exhibiéndose o solicitando que lo tocaran sin que los menores accedieran.

También era consultado, en su calidad de garante de la buena fe de la Iglesia, por diversos temas. En el año 2013, opinó en un reportaje periodístico respecto de los altos costos de los matrimonios: “la Iglesia no puede aparecer negociando y eso es una tarea que desde las vicarías zonales estamos trabajando” y adujo que “la idea es detectar esos casos, porque pueden resultar escandalosos para los fieles. Los sacramentos no son una mercancía transable, sino signos de la gracia”.

SECRETOS

“El día martes 2 de enero del año en curso, el presbítero se autodenunció por abuso. Tras ello, se implementaron medidas cautelares, siendo relevado de sus cargos de canciller de la curia y párroco, prohibiéndosele -además- el ejercicio público del ministerio sacerdotal”. Así comunicó la Iglesia el 24 de mayo, en la víspera de la visita del arzobispo de Malta Charles Scicluna, la situación de Muñoz Toledo.

Cuando Scicluna ya estaba en Chile, Arias encabezó un operativo inédito: el 13 de junio procedió a la incautación de documentos en dependencias del Tribunal Eclesiástico de calle Catedral en Santiago, el Arzobispado de Santiago y en paralelo en el edificio de la Diócesis de Rancagua buscando información sobre presuntos abusos sexuales a menores por parte de miembros de la curia.

Durante la tarde de aquella jornada, junto al fiscal nacional, Jorge Abbott y otros persecutores, se reunió con Scicluna para coordinar una petición de información de casos de todo Chile a la Congregación para la doctrina de la Fe en el Vaticano. Esta gestión en marcha, pero dada la relevancia de los datos recopilados hace ya un mes, Arias dio un paso más allá: esta semana solicitó y le fue concedida la entrada, registro e incautación de archivos en la Oficina Pastoral de Denuncias (OPADE), que fue creada por decreto N° 362 el 2 de noviembre de 2011y que tiene como objetivo estar disponible para recibir las denuncias y acoger a las víctimas de abuso por parte de clérigos y agentes pastorales “contra el sexto mandamiento”;  y volver a ingresar al Tribunal Eclesiástico.

La custodia de estos documentos estuvo, formalmente, en manos de Muñoz Toledo por años. Sin embargo, al parecer, al menos en su caso no hubo destrucción de antecedentes. El Papa, en una de sus cartas a la Iglesia chilena, acusa que según los antecedentes recabados por Scicluna sí existió esta maniobra en otras causas.

Cabe consignar que los documentos a los que la Fiscalía busca acceder en el caso de sacerdotes que hubieran cometido abusos, se rige por la ley canónica que establece que cada diócesis y arquidiócesis mantenga carpetas o “archivos” personales de cada sacerdote que es parte de su jurisdicción. Aquí se incluyen desde asuntos administrativos a otros especialmente sensibles, como eventuales acusaciones de abusos sexuales.

La situación específica de Muñoz Toledo, quien cometió delitos en O’Higgins fue lo que le permitió a Arias acceder a los antecedentes clave. La Fiscalía Nacional debe determinar si amplia la indagatoria del persecutor y la hace extensiva a otras diócesis.

CARDENAL EZZATI

El Cardenal Ricardo Ezzati se refirió esta jornada a la detención del excanciller de Santiago, Óscar Muñoz, efectuada durante esta mañana y que La Tercera PM dio a conocer.

El prelado dijo que durante esta mañana “el fiscal Arias se presentó una vez más al Arzobispado con una orden de entrada, registro e incautación “de todas las piezas de investigaciones, tanto aquellas de carácter de denuncias, de investigaciones previas, así como aquellas que hayan sido puestas en conocimiento de la congregación para la Doctrina de la Fe, desde 2007”.

Reiteró que la Iglesia tiene “disponibilidad de colaborar con la justicia en todo lo que sea requerido. Un dolor muy grande, por él, por su familia y por las víctimas. Un pensamiento muy cercano y cordial a las víctimas que han sufrido de parte de él estos abusos”.

El Fiscal Regional de O’Higgins, Emiliano Arias dijo que los delitos imputados al excanciller no están prescritos. Están investigando la hipótesis de posibles encubrimientos en estos hechos.

“Es encubridor aquel que con conocimiento de la comisión de un delito en definitiva, con posterioridad, facilita que éste no sea descubierto. Esa hipótesis está siendo investigada en este caso”, señaló.

“Hasta el momento la investigación ha avanzado (…). No se puede descartar que haya más víctimas”, complementó el persecutor.

Dijo, además, que el avance de la investigaciones canónicas es más lento que el que realizan ellos.

Cabe recordar que el 13 de junio pasado, el fiscal Arias realizó una incautación inédita de documentos del Tribunal Eclesiástico de Santiago. Tras la revisión de esos archivos, se detectó que existe constancia desde 2002 hasta marzo de este año de abusos sexuales y estupro contra menores que habrían sido cometidos por Muñoz. Serían siete las víctimas del excanciller, que cuando habrían ocurrido los hechos tenían entre 11 y 17 años.

Oscar Muñoz, quien mantenía uno de los cargos más altos de la Iglesia, se autodenunció a principios de año a raíz de la denuncia de un abuso que habría ocurrido en su vivienda.

ALLANAN ARZOBISPADO DE SANTIAGO

El jefe de la Dirección de Investigación Criminal, Esteban Díaz, confirmó el allanamiento e incautacion de evidencia desde el Arzobispado de Santiago y del Tribunal Eclesiástico tras la detención del excanciller Óscar Muñoz Toledo en Macul.

El sacerdote de 56 años, quien se autodenunció a finales de mayo, enfrenta acusaciones por 7 presuntos casos de abuso sexual, algunos contra miembros de su propia familia. Díaz confirmó que 5 casos de esta naturaleza están siendo investigados.

El uniformado detalló también que, tras su detención, fue llevado a un centro asistencial para verificar su estado de salud, y confirmó se encuentra en “perfectas condiciones”.

Desde Carabineros hicieron un llamado a todos quienes han sido víctimas de estos delitos a acercarse a las unidades de la institución y pusieron a disposición un correo electrónico denunciaelabuso@carabineros.cl para este fin.

El fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, dijo que la investigación ha avanzado de forma importante, y confirmó que los delitos por los que se formalizaría al sacerdote no han prescrito, por lo que “la responsabilidad penal es plena”.

Detalló que se están investigando presuntos casos de abuso sexual de naturaleza reiterada y un caso de estupro.

Asimismo, también se están investigando las acusaciones de encubrimiento.

Según fuentes consultadas por Radio Bío Bío, este viernes será formalizado a las 9:00 horas en los Tribunales de Rancagua. (La Tercera-Bio Bio)

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