Británicos votan por salida de la UE: Cameron renuncia y caen bolsas...

Británicos votan por salida de la UE: Cameron renuncia y caen bolsas y libra

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“Esta es la victoria que significa un nuevo día de la independencia para nuestro país. Es el alba de un Reino Unido independiente”. Con esas palabras el líder del partido euroescéptico Ukip, Nigel Farage, celebraba esta noche la ventaja irremontable de la opción por abandonar la Unión Europea. “Llegó el momento de liberarnos de Bruselas”, añadió.
Aunque los sondeos y las casas de apuesta daban por ganador a la opción de la permanencia en el bloque (“Remain”), los electores británicos dijeron lo contrario y esta noche el Brexit se impuso con 52% de los sufragios, frente a un 48% de quienes querían quedarse, separándolos más un millón 200 mil de votos. 
Escocia, las grandes ciudades, los pequeños territorios como Gibraltar o  las islas convertidas hace décadas en paraísos fiscales, daban una clara  tendencia favorable a la permanencia, incluso con dígitos más elevados de lo  que se esperaba. Por otro lado, regiones enteras del centro y el sur de  Inglaterra, arrojaban resultados rotundamente antieuropeístas, superiores en movilización.
Las primeras en reaccionar fueron las bolsas asiáticas que abrieron a la baja, seguidos por el petróleo y la libra, que se desplomó a su nivel más bajo desde 1985. 
Los analistas coincidían que una salida de Reino Unido provocaría un terremoto no sólo en los mercados, sino que también en la Unión Europea en sí y en el mismo país. De hecho se trata del mayor golpe en la historia del bloque.
A su vez, el primer ministro británico, David Cameron, que abogaba por la permanencia, deberá enfrentar su derrota y -según los analistas- abandonar el cargo. Esto teniendo en cuenta que la celebración del referendo se debió a la presión de un grupo al interior del Partido Conservador. Durante la campaña se especuló sobre quién lo podría suceder en caso de que ganara el Brexit y uno de los nombres que sonaba era el ex alcalde de Londres, Boris Johnson, firme partidario del Brexit.
Cameron debe ahora asistir a una cumbre del bloque el 28 y 29 de junio, en la que anunciará la decisión. Se estima que se podrían tardar hasta dos años en que se concrete la salida. Luego, Reino Unido deberá negociar su relación completa con la Unión Europea, desde el comercio hasta la migración.
La relación con el bloque data desde 1973. Un 45% de las exportaciones de la isla van hacia la Unión Europea. En 2014, eso correspondió a US$ 320 mil millones, mientras que las importaciones alcanzaron US$ 406 mil millones.
En la campaña, los brexistas argumentaban que con la salida, el país no tendría que ceñirse a las leyes europeas. Esto pese que según un artículo del diario The Guardian, en los últimos 10 años, un 13% de las actas parlamentarias legislativas e instrumentos de estatutos británicos implementaron leyes provenientes de la Unión Europea.
Los que querían la salida, también señalaban que un Reino Unido sin Bruselas podría lograr acuerdos comerciales con China, India y Estados Unidos.
Sin embargo, de acuerdo a un análisis del Instituto Nacional de Economía e Investigación social el país podría reducir de forma permanente su PIB en 2,25%, debido -principalmente- a la reducción de la inversión extranjera. Es más, otro estudio del London School of Economics, señaló que el ingreso sufriría una caída entre 6,3% y 9,5% del PIB, similar a las pérdidas en la crisis financiera global de 2008-2009.
De acuerdo al Centro para la Reforma Europea, pese a que Reino Unido es un contribuyente neto a la Unión Europea, después del Brexit el país podría enfrentar presión para reemplazar con el gasto doméstico el financiamiento regional del bloque y los subsidios a la agricultura.
Por su parte, la UE deberá enfrentar sus propios desafíos. En primer lugar, es el primer país que abandona el bloque justo en un momento en que enfrenta una severa crisis migratoria y viene saliendo de una crisis económica. Los analistas señalaban que un Brexit podría impulsar a los movimientos euroescépticos en el bloque y así países como Holanda, o incluso Francia, que muestran  también en los sondeos unos niveles de nacionalismo muy elevados, podrían exigir la celebración de un referendo similar o una renegociación de la membresía, tal como que la que hizo Cameron en febrero pasado.
A pesar de su desafiante campaña, los euroescépticos estaban confrontados a  sus propios retos. Una salida de la UE atizaría previsiblemente las demandas de  los independentistas escoceses y de los republicanos norirlandeses. Y dejaría  en territorio desconocido a millones de inmigrantes europeos en Reino Unido  y de británicos en la UE.
RENUNCIA DE CAMERON
El primer ministro británico, David Cameron, anunció hoy su intención de dimitir en octubre después de que el Reino Unido votase a favor de la salida de la Unión Europea.

En una declaración ante la puerta de su residencia oficial del número 10 de Downing Street, Cameron dijo que el pueblo británico se ha manifestado y esa voluntad debe ser respetada.

 El político comunicó su intención de dimitir como líder «tory» y primer ministro después de que el «brexit» -la salida británica de la UE- ganase con el 52% de apoyo en el referéndum celebrado ayer.

También informó de que las negociaciones con Bruselas para establecer el proceso de ruptura del Reino Unido de la UE deberán hacerse con otro líder, que deberá ser elegido para el próximo mes de octubre, cuando se celebrará el congreso de la formación.

Los tories tienen previsto reunirse en su congreso anual entre el 2 y el 5 de octubre en la ciudad inglesa de Birmingham.

Según indicó, el próximo primer ministro deberá decidir si pide activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que establece el proceso sobre la retirada de un Estado miembro de la UE.

Cameron tranquilizó además a los comunitarios que viven en el Reino Unido al afirmar que no habrá «cambios inmediatos» en sus circunstancias ni tampoco de los británicos que estén residiendo en otros países del bloque europeo.

Según explicó, no habrá modificaciones iniciales en el libre movimiento de ciudadanos, mercancías y servicios.

«La voluntad del pueblo británico es una instrucción que debe ser cumplida. Quiero a este país y me siento honrado de haberle servido y haré todo lo que pueda en el futuro para ayudar a este gran país a prosperar», subrayó el líder conservador con la voz entrecortada.

«El Reino Unido es un país especial, tenemos tan grandes ventajas, una democracia parlamentaria en la que resolvemos los grandes problemas sobre nuestro futuro a través de un debate pacífico, una gran nación comercial con nuestra ciencia y las artes», subrayó Cameron visiblemente emocionado.

Tras reconocer que el país no es perfecto, sostuvo que puede ser modelo de democracia «multirracial» y «multirreligiosa».

«Si bien salir de Europa no era el camino que yo había recomendado -dijo-, soy el primero en elogiar nuestra increíble fortaleza».

«Ahora que la decisión de salir ha sido tomada, necesitamos encontrar la mejor manera (de hacerlo)», agregó el «premier», y comunicó que el Gobierno se reunirá el próximo lunes.

Más de 46 millones de ciudadanos estaban llamados a las urnas para decidir en un plebiscito si querían continuar o salir de la UE.

Los votantes tuvieron que responder con una equis a la pregunta: «¿Debería el Reino Unido permanecer como miembro de la Unión Europea o abandonar la Unión Europea?».

CONSECUENCIAS

1- Dimisión del primer ministro David Cameron 

Aunque Cameron ha reiterado que seguirá en el cargo, «no duraría ni 30  segundos», dijo Kenneth Clarke, del Partido Conservador. Cameron ha puesto su  credibilidad en juego convocando un referéndum que ha fracturado a los  conservadores, y luego defendiendo la permanencia. Los conservadores tendrían  que designar a un sucesor y el victorioso líder de los pro-Brexit, Boris  Johnson, parece el candidato natural.

2- ¿El Reino Desunido?

La jefa del gobierno regional escocés, Nicola Sturgeon, ha repetido en  numerosas ocasiones que la salida de la UE les llevaría a reclamar otro  referéndum de independencia, si los escoceses votaban a favor de quedarse. Pero  los escoceses podrían votar a favor de la UE y no estar necesariamente  convencidos de la independencia, según un reciente sondeo.

Por su parte, la provincia británica de Irlanda del Norte vive un frágil  proceso de paz. Suya es la única frontera terrestre británica con la UE, con  Irlanda, por lo que habría que reinstaurar los controles fronterizos y eso  podría provocar tensiones. Bruselas ha inyectado miles de millones de euros  para apoyar los Acuerdos de paz de Viernes Santo, de 1998, que pusieron fin a  tres décadas de enfrentamientos entre católicos y protestantes. Los  nacionalistas, en particular, consideran a Bruselas como un contrapeso al  gobierno británico.

3- Con la UE, un divorcio de resultado incierto 

El país debe comenzar complicadas negociaciones con la UE, que podrían  extenderse dos años como máximo, y en las que se decidirán las condiciones de  acceso de Londres al mercado único. Varios escenarios son posibles. Por  ejemplo, que se acordara un acceso mutuo a los mercados, pero ¿en qué  condicionesâ El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ya  advirtió que «el Reino Unido será un estado tercero que no tendrá el camino  allanado».

4- Una transición económica difícil, incluso una recesión  

El impacto en los mercados del Brexit saltó a la vista inmediatamente, con  una caída pronunciada de la libra y las bolsas. Todos los escenarios para los  dos años siguientes contemplados por las instituciones económicas  internacionales son sombríos. Un estudio realizado por HSBC predijo una caída  de la libra de un 15 a un 20%, una inflación del 5%, y una pérdida de 1 a 1,5%  del PIB.

La City podría perder su condición de «pasaporte europeo» y varias empresas  como JPMorgan e incluso el gigante británico HSBC anunciaron que trasladarían  miles de puestos de trabajo a París o Fráncfort.

5- Endurecimiento de la política de inmigración 

La inmigración ha sido uno de los temas centrales de la campaña pro-Brexit,  que ha anunciado su intención de crear un sistema de puntos para aceptar a  inmigrantes copiado del australiano. Cada solicitud de permiso de residencia y  trabajo será tratada de acuerdo a las habilidades y calificaciones del  solicitante. Una vez consumado el divorcio con la UE y el fin de la libre  circulación, nada impedirá implementar esta política.

REFERENDUM ESCOCES

Es «altamente probable» que se convoque a otro referendo de independencia en Escocia, aseguró hoy la ministra principal de ese gobierno, Nicola Sturgeon, luego que ganara la salida del Reino Unido de la Unión Europea, dado paso al proceso denominado Brexit.

Sturgeon «lamentó» el resultado del referéndum celebrado el jueves, en el que un 52% frente a un 48% de los británicos apoyó el Brexit, y aseguró en una conferencia de prensa que hará «todo lo posible» para mantener Escocia en la UE.

 A diferencia de Inglaterra y Gales, la autonomía escocesa votó mayoritariamente el jueves a favor de permanecer en la Unión, por lo que el Gobierno autónomo considera ahora que se la sacará del bloque comunitario por la fuerza. «Tal como están las cosas, Escocia afronta la perspectiva de ser sacada de la UE contra su voluntad. Considero que eso es democráticamente inaceptable», declaró.

La líder independentista señaló que el Brexit supone «el cambio material de circunstancias» que su Gobierno requería para contemplar un segundo plebiscito, por lo que este «debe estar y está sobre la mesa».

En ese sentido, informó de que el Parlamento escocés empezará a preparar «la legislación necesaria» para posibilitar una segunda consulta y su gabinete se reunirá mañana para fijar los pasos a seguir.

Además, Sturgeon dijo que pedirá al Gobierno central que permita al Gobierno de Edimburgo estar informado e involucrado en todos los pasos de la negociación para salir de la Unión Europea (UE), una vez se invoque el Artículo 50 del Tratado de Lisboa. Pedirá también entrevistarse con el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean Claude Juncker, adelantó.

El Gobierno del Partido Nacionalista Escocés (SNP), liderado entonces por Alex Salmond, convocó un referendo de independencia el 18 de septiembre de 2014, que perdieron los independentistas con un 45% de los votos, frente al 55% que apoyó la unidad con el Reino Unido.

En su intervención de hoy, la ministra principal recordó que esa consulta se perdió en parte porque los unionistas lograron convencer a los escoceses de que dejar el Reino Unido significaría que Escocia se quedaría fuera de la UE, lo que ha ocurrido de todas maneras.

«Esto significa que hay un cambio material y significativo en las circunstancias en las que Escocia votó contra la independencia en 2014», afirmó.

Por otra parte, Sturgeon opinó que el voto favorable al Brexit se ha debido sobre todo al «descontento» de los ciudadanos con los recortes del Partido Conservador y el abandono del Partido Laborista.

 CAE LA LIBRA ESTERLINA

El temor de una salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE) derrumbó a la libra esterlina a su menor nivel en 31 años. Los mercados cambiarios, que siguieron con atención los primeros resultados del referendo realizado ayer, llevaron anoche y en la madrugada de este viernes a la moneda local por debajo de US$ 1,3466, su peor nivel desde 1985, lo que implica un derrumbe de 9,5% respecto al cierre del jueves.

En paralelo, el euro retrocedía 3,4% a US$ 1,0997, porque los inversores temían por su futuro, y comenzaban a refugiarse, entre otras, en la moneda japonesa, que se disparaba a 101,52 yenes por dólar; y en el oro, que subía más de 8%.

 A esa misma hora, se conocía que, tras el recuento de la mayoría de los votos emitidos en el país, la opción de dejar la UE lideraba los resultados, con el 51% de las preferencias.

Un poco antes, tras el cierre de los locales de votación, y en momentos en que las encuestas favorecían la permanencia de Reino Unido en la UE, la libra se llegó a cotizar algo por debajo de US$ 1,5, para cerrar en US$ 1,4877, un 1,2% más que el día previo, el nivel más alto de este año.

En la primera muestra de preocupación a nivel internacional, el viceministro de Finanzas de Japón para asuntos internacionales, Masatsugu Asakawa, dijo que consultaría con el ministro de Finanzas, Taro Aso, sobre la forma de responder a los movimientos del mercado.

Más tarde, el gobernador del Banco de Japón (BoJ), Haruhiko Kuroda, y el ministro de Finanzas nipón, Taro Aso, se comprometieron este viernes a hacer uso de la permuta de divisas, entre otras medidas, para estabilizar los mercados ante la victoria del Brexit en Reino Unido. 

El BoJ «está dispuesto a proporcionar suficiente liquidez (a los mercados), incluyendo líneas de intercambio entre seis bancos centrales, de cara a proporcionar estabilidad», explicó Kuroda en un comunicado emitido después de que se diera por hecho la victoria del Brexit.

En una comparecencia aparte ante los medios, Aso se mostró también en favor de activar estas redes de intercambio de divisas como mecanismo para controlar la sangría en los mercados. Aso dijo estar «muy preocupado» por el impacto financiero del Brexit y señaló que los movimientos que ha mostrado hoy el mercado de divisas han sido «extremadamente sensibles».

ALEMANIA Y FRANCIA

La Canciller alemana, Angela Merkel y el Presidente francés, François Hollande, lamentaron la victoria del Brexit en el referéndum que se celebró este jueves en el Reino Unido y que determinó su salida de la Unión Europea.

La máxima autoridad alemana afirmó que el Brexit es un «golpe contra Europa y el proceso de unificación», pero fue enfática en recalcar que «la unión europea es lo suficientemente fuerte para dar las respuestas correctas para lo que sucedió hoy».

Así, pidió «calma» y «moderación» para las negociaciones que comenzarán en breve entre la Unión Europea (UE) y Londres.

Por su parte, Hollande lamentó «profundamente» la decisión de los británicos y advirtió que con ella «el peligro es inmenso ante los extremismos y los populismos», y que su país no permitirá esa deriva. «Siempre hace falta menos tiempo para deshacer que para hacer, para destruir que para construir.

Francia, país fundador de Europa, no lo aceptará», dijo en una declaración institucional en el Elíseo, sede de la presidencia gala. Además, sostuvo que desde ahora Europa debe «concentrarse» en seguridad, inversión, armonización fiscal y social.

Tras conocerse los resultados oficiales que daban la victoria al Brexit, ambos Mandatarios convocaron en sus respectivos países a reuniones ministeriales y de partidos políticos, para analizar la situación y poder determinar los pasos a seguir.

En ese mismo sentido, Merkel anunció que el próximo miércoles se reunirá en Bruselas con Hollande para coordinar las acciones.

ESTADOS UNIDOS

El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró hoy que la «relación especial» que mantiene su país con el Reino Unido no cambiará, a pesar de su salida de la Unión Europea (UE) tras el referéndum del jueves.

Biden hizo estas declaraciones en Dublín durante una visita a la República de Irlanda, donde reconoció que tanto él mismo como el presidente de EE.UU., Barack Obama, confiaban en que Londres permanecería en el bloque comunitario.

No obstante, reiteró que respetan la decisión tomada por la mayoría del electorado británico, que respaldó el Brexit con un 52% de los votos, frente al 48 % que optó por mantener los lazos con Bruselas.

En un acto celebrado en la universidad dublinesa Trinity College, Biden reiteró que la «antigua amistad» que mantienen EE.UU. y el Reino Unido no se verá alterada por el resultado de la consulta, al tiempo que prometió que «perdurará su relación especial».

Del mismo modo, agregó, los vínculos que tiene su país con Irlanda y la UE continuarán siendo la «piedra angular de su compromiso global».

Biden estuvo acompañado durante ese acto por el presidente de la República de Irlanda, Michael Higgins, cuyo Gobierno, dirigido por el primer ministro, el conservador Enda Kenny, celebra esta mañana una reunión para analizar las consecuencias del «brexit».

A la espera de que Kenny comparezca ante los medios, el Ejecutivo indicó en un breve comunicado que la salida del Reino Unido de la UE tendrá un impacto «muy significativo» sobre Irlanda, el país vecino y el bloque comunitario.

RUSIA

El presidente ruso, Vladimir Putin, se refirió hoy a la victoria del Brexit, señalando que le parecía una opción lógica. «Me parece comprensible lo que sucedió, primero, porque nadie quiere alimentar y subsidiar a economías más pobres, mantener a otros Estados y financiar otras naciones».

En el marco del encuentro de la Organización para la Cooperación de Shangai, en Tashkent, el primer mandatario de Rusia afirmó que «al parecer, los ingleses no están satisfechos por la forma en que se están resoviendo los problemas al menos en el ámbito de la seguridad. Estos problemas se han acentuado aún más con todo el proceso de migración», sugiriendo así que ésa sería la segunda razón por la cual en Reino Unido triunfó la opción de dejar la Unión Europea.

De todas formas, Putin afirmó que no esperaba que la votación de Gran Bretaña de abandonar el acuerdo influiría en las sanciones económicas impuestas a Rusia por la UE. Eso sí, el líder ruso dijo que estaba listo para el diálogo con la Comunidad, pero la clave para resolver el problema de las sanciones por el liderazgo de Ucrania, estaba en cumplir sus compromisos dentro del acuerdo de paz de Minsk.

FELIPE GONZÁLEZ

El ex presidente del gobierno español, Felipe González, escribió una columna de opinión que fue publicada hoy por el diario hispano El País, donde se refiere al triunfo del llamado «Brexit» en la Gran Bretaña.

«David Cameron pasará a la historia como el político irresponsable que puso en juego el interés general de Gran Bretaña y de Europa para resolver un problema personal y de partido», comienza señalando.

«El populismo y el nacionalismo galopan y contaminan. Podría ser una vacuna, pero es más probable que suponga un contagio en otros países de la Unión Europea. Depende de nosotros, los europeos europeístas, de los que creemos en la integración europea con fidelidad a los fundamentos de esta Unión», agrega.

«Gran Bretaña siempre ha sido reticente a los avances integradores de la UE. Los británicos solo querían una zona de libre cambio, no instituciones comunes. Margaret Thatcher era un exponente claro de esta actitud, pero con una diferencia que me expresaba con estas palabras: ‘Estoy en contra de un mayor grado de integración, pero nunca apearé a Gran Bretaña del tren europeo'», afirma González.

«Y esto es lo que ha hecho Cameron. Bajar a Gran Bretaña de este tren. Y han ganado los que no tienen un plan alternativo para esta salida. Es el triunfo de las emociones negativas. Y Cameron se acabó. Quedó invalidado para gestionar la situación a la que ha llevado a su país», indica el ex presidente del gobierno español.

«Lo peor es que los que ganaron el Brexit no tienen un proyecto alternativo. No hay plan de salida para Gran Bretaña, pero puede y debe haberlo para la Unión Europea. Y en Gran Bretaña los jóvenes han votado por su futuro en Europa y han perdido. Han perdido por la decisión de los mayores. Gran paradoja interna: el futuro lo deciden los que no lo tienen», repara.

«La UE tiene que reaccionar y actuar para revertir el proceso de desafección creciente de los ciudadanos en muchos países de la Unión. Porque también hay una responsabilidad de lo ocurrido en Gran Bretaña en los errores de la política europea contra la crisis, o en su falta de políticas ante el fenómeno de los refugiados», añade.

«Vivimos la paradoja de necesitar más y mejor Europa para los ciudadanos europeos y para el mundo, cuando dominan políticas de austericidio, de renacionalización de las decisiones. Hoy, más que nunca, necesitamos políticas socialdemócratas que sean alternativa real a las políticas neoconservadoras, a los populismos nacionalistas», concluye. (La Tercera-Emol-DF-El Mostrador-Agencias)

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