El diputado Gabriel Boric (independiente) abordó el viaje que realizó junto a su familia a la isla Lennox -en un barco de la Armada- para instalar un monolito en honor a su bisabuelo.
A través de su blog , el parlamentario indicó que se obtuvo una autorización de Bienes Nacionales -otorgada el 14 de noviembre de 2016-, ante lo cual se requirió coordinación con la Armada, la que se realizó en los meses siguientes. También dice que para efectuar el homenaje, se aprovechó un recorrido de rutina que realiza la Armada para el establecimiento de zonas aisladas: «No participé ni directa ni indirectamente en ninguna de estas gestiones, consciente de que esto podría haber significado una presión indebida a una institución».
Boric se refirió a una columna que publicó este fin de semana en «El Mercurio» el rector de la UDP, Carlos Peña, donde señala que el diputado cometió un error. «La pregunta de fondo es cuál es el estándar de conducta exigible a una persona que se dedica a los asuntos públicos, y en particular, a un parlamentario. Y en esto, Carlos Peña tiene un punto. Es evidente que frente al nivel de desprestigio de la política en Chile, cualquier hecho reñido no ya con la ley, sino con la ética, resulta inmediatamente reprochable. El problema aquí recae en definir una ética común, tarea difícil y a la que quienes no buscan la verdad sino enlodar al del frente (independiente del color que sea), hacen un flaco favor», dice Boric.
«En perspectiva -continúa-, creo que existe una duda razonable sobre el asunto. En particular, porque aunque no haya hecho gestión alguna para materializar el viaje, resulta atendible cuestionarse si se accedió al traslado de mi familia para una actividad privada debido a mi condición de parlamentario».
Boric dice tener «la convicción de que es correcto exigir un estándar de conducta mayor a quienes se dedican a los asuntos públicos, bien vale pedir excusas a quienes han visto en este episodio un hecho de uso injustificado de privilegios. Ofrezco además mis disculpas a la Armada por haberla envuelto en esta polémica que podría haber sido prevista. En esto la responsabilidad es mía».
El padre del diputado, Luis Boric, señaló que fue él, y no su hijo, quien contactó a la Armada. Desde la institución indicaron que no se realizó un viaje especial a la isla, sino que «obedeció a una comisión logística programada». (El Mercurio)

