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Banco Central sube tasa de política monetaria 1.25% y la lleva a 8,25%

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El escenario y las perspectivas para la inflación en Chile han sorprendido a las autoridades. Este panorama llevó al Banco Central a nuevamente tomar una decisión que estuvo por sobre el panorama que estimaban los analistas.

Esto porque en el debut de la economista Stephany Griffith-Jones en el Consejo, el instituto emisor sorprendió al mercado al aumentar en 125 puntos la Tasa de Política Monetaria (TPM), para llevarla a 8,25%.

La decisión fue adoptada por la unanimidad de los consejeros, en circunstancias que los analistas consultados la semana pasada por el emisor esperaban un incremento en el interés rector de 100 puntos base. Ya en diciembre el banco había aplicado un alza de 125 puntos, mientras que en enero y marzo el aumento fue de 150 puntos en cada reunión.

La medida se da luego de que la inflación superara las expectativas del mercado y el banco en marzo, rozando el 10% en su variación anual.

Esto llevó a que en apenas un par de días después de la publicación del Informe de Política Monetaria (IPoM), la entidad reconociera que parte de su diagnóstico había sido superado por las cifras efectivas de precios, en circunstancias en que se discutía un nuevo retiro anticipado de fondos previsionales y que los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania ya comenzaban a manifestarse en los precios de los combustibles y los alimentos.

«La evolución reciente de la inflación y sus perspectivas de corto plazo se ubican por sobre lo previsto en el IPoM de marzo. Esta situación intensifica los riesgos del escenario inflacionario, por lo que el Consejo ha decidido un aumento de la TPM que la sitúa en torno al borde superior del corredor de tasa del último Informe», señalaron los consejeros.

Entre los antecedentes que entregó el banco en su comunicado, apuntó a que la inflación de marzo fue «significativamente mayor» a lo previsto en el último IPoM, con lo que variación anual del IPC subió a 9,4% y 7,6% el IPC subyacente (sin volátiles), destacando el alza de los precios de los alimentos y los combustibles y de algunos «ítems puntuales».

«Las presiones inflacionarias internas se han visto incrementadas por las alzas de los precios internacionales de la energía y los alimentos, la depreciación del tipo de cambio y los sostenidos problemas de suministro global. Las expectativas para la inflación provenientes de las encuestas -EEE y EOF- permanecen por sobre 3% a dos años plazo», consignó el banco.

OTROS BANCOS CENTRALES

En el análisis de la situación de los mercados financieros, el instituto emisor hizo mención al proceso de ajustes monetarios que están llevando a cabo otras autoridades en el mundo, destacando la Fed norteamericana que aumentó en 50 puntos base la tasa el miércoles, su mayor incremento desde el 2000.

«Los movimientos de los mercados financieros globales han estado mayormente determinados por los riesgos asociados a la velocidad con la que los principales bancos centrales retirarían los estímulos monetarios, en particular la Reserva Federal de Estados Unidos», puntualizaron los consejeros.

En este contexto, continuaron, desde la reunión de fines de marzo las tasas de interés de largo plazo aumentaron en diversas economías, las bolsas descendieron y el dólar se apreció a nivel global, «todo esto en un ambiente de mayor volatilidad financiera».

El emisor recalcó que la inflación a nivel mundial ha seguido aumentando, mientras los bancos centrales han «intensificado» el retiro de sus estímulos.

«Esto se ha dado en un escenario en que los precios de las materias primas y los alimentos se han mantenido elevados y en que los confinamientos en China han puesto presiones adicionales sobre la recuperación de las cadenas de suministro global. Las perspectivas de crecimiento mundial para este año se han ido ajustando a la baja, acercándose a los valores previstos en el IPoM de marzo. Esto, en medio de una incertidumbre que se mantiene alta a causa de la invasión de Rusia a Ucrania y de señales de preocupación en torno a la actividad en China», apuntaron los consejeros.

DESACELERACION EN CHILE

En base a los Imacec ya conocidos, el banco calcula que la economía se habría expandido un 7,9% en el primer trimestre del año, «algo por sobre lo estimado» en el IPoM, en particular por el resultado de marzo.

«Por el lado de la demanda, los indicadores de corto plazo muestran que el consumo sigue resiliente, mientras que la inversión se debilita», enfatizaron las autoridades. En esta última, continuó el banco, si bien las importaciones de capital permanecen elevadas, la mayoría de los indicadores asociados a la construcción «han continuado decayendo y la información de los catastros se revisa a la baja para el período 2022-2025».

«En el mercado laboral, el aumento del empleo se ha ido ralentizando desde fines del año pasado, en un contexto en que distintos indicadores dan cuenta de una demanda menos dinámica y una oferta que, aunque con alguna mejoría, sigue acotada», concluyeron los consejeros.

OPOSICIÓN APRUEBA ALZA

Tras conocer la decisión del Banco Central de aumentar en 125 puntos la tasa de política monetaria, los representantes de oposición de las comisiones de Hacienda del Senado y la Cámara, respaldaron la medida, aun cuando algunos de ellos admiten que el alza fue mayor a lo esperado, porque estiman que es la única manera de contener la inflación que sigue aumentando en nuestro país.

El presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, Juan Antonio Coloma (UDI), no se mostró sorprendido ante el anuncio del Banco Central, muy por el contrario, recordó que en el último Informe de Política Monetaria (IPoM), la presidenta del instituto emisor, Rosanna Costa, “dejaba claro que las noticias en materia de inflación eran complejas; así es que uno podía entender que las medidas que iba a tomar el Banco Central iban a ser máximas y no mínimas”.

En ese contexto, valoró además que la decisión se tomara de forma unánime, porque ello “la fortalece” y es la forma correcta de reaccionar para “enfrentar el peor de los flagelos, que es la inflación, como impuesto a los más pobres particularmente”.

Mientras que uno de sus compañeros de coalición en la misma instancia, el RN José García Ruminot, compartió con Coloma que las alzas sostenidas de los precios obligaron a la autoridad monetaria a elevar significativamente la tasa de interés, más de lo esperado incluso.

Desde el punto de vista de García, medidas como esta son “dolorosas, pero necesarias para que la inflación, que se proyecta en más de 10% en doce meses, pueda converger al rango meta habitual de 3%”. Y reiteró que la inflación afecta en mayor proporción a los grupos más vulnerables, disminuyendo significativamente su poder de compra; “por eso es tan importante la estabilidad de precios y las acciones del Banco Central para lograrlo”.

El representante de Evópoli en la Comisión de Hacienda del Senado, Felipe Kast, al igual que sus colegas, respaldó la decisión del organismo, subrayando que “la decisión del Banco Central de subir la tasa a su máximo histórico, desde 2008, va a significar un costo de endeudamiento para millones de familias chilenas, para el sueño de la casa propia, y, desgraciadamente, esto no es simplemente producto de la inflación que ha sufrido el resto del mundo”.

Kast responsabilizó así a la política pública de los retiros de fondos desde las AFP de “buena parte” de la inflación que afecta actualmente al país.

“CONSUMO RESPONSABLE”

Mientras que en la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, los representantes de ChileVamos comparten la mirada de sus pares del Senado.

En este contexto, el integrante de la instancia de la UDI, Guillermo Ramírez, señaló que “con el precedente de la Fed era un dato que el Banco Central subiría las tasas”. Sin embargo, reconoció que el alza en Chile “fue mayor a la esperada”, lo que –a su juicio– refleja que para la entidad “el problema inflacionario es más difícil de corregir que lo que ha transmitido el gobierno».

Por su parte, el también integrante de Hacienda, el RN Frank Sauerbaum, manifestó que si bien el alza de la tasa era esperable, resulta “muy preocupante”, por lo que hizo un llamado a las familias “a tener un consumo responsable, consumir de acuerdo a sus necesidades, lo más reducido posible” e instó a evitar el endeudamiento.  Insistiendo en que es el momento de disminuir los gastos innecesarios, señaló que “la única consecuencia positiva, que yo veo, puede ser una baja en el precio del dólar, que nos ayude por ese lado a bajar los niveles de inflación”.

El representante del Partido Republicano en la Comisión de Hacienda de la Cámara, Agustín Romero, reiteró que el aumento de la tasa estuvo por sobre las estimaciones que los expertos hacían hace unos días, lo que “nos deja en una situación económica  bastante compleja como país, ya que significa que la inflación no nos está dando tregua”.

Por eso manifestó su convicción de que “hoy, más que nunca, tenemos que ser responsables con las políticas financieras, pero a la vez tenemos que acompañar a las familias chilenas, porque esto va a seguir golpeando la economía de los hogares”, por lo que –desde su punto de vista– se deben buscar las mejores medidas para aliviar el bolsillo de la ciudadanía.

NUEVAS ALZAS

Según los analistas, el Banco Central, que preside Rosanna Costa, hizo en su comunicado un claro reconocimiento de que la inflación está por sobre lo que preveía, luego de que llegara a 9,4% anual en marzo. A esto se suma que este viernes se conocerá el IPC de abril, que podría superar el 1% y llevar la inflación en 12 meses a los dos dígitos.

  • “La evolución reciente de la inflación y sus perspectivas de corto plazo se ubican por sobre lo previsto en el IPoM de marzo. Esta situación intensifica los riesgos del escenario inflacionario”, dijo el BC.
  • En cuanto a la actividad, señaló que con los Imacec publicados, la actividad habría crecido 7,9% en el primer trimestre de 2022, algo por sobre lo estimado en el IPoM, principalmente por el resultado de marzo. Por el lado de la demanda, los indicadores de corto plazo muestran que el consumo sigue resiliente, mientras que la inversión se debilita.

Efectos en el mercado.

  • La mayoría de los analistas estima que este aumento en la tasa de política debiera poner un freno al alza del dólar, al menos en el corto plazo. En todo caso, advierten que esto también dependerá de los mercados internacionales y el precio del cobre.
  • Prevén un efecto directo en las tasas de mercado, con un incremento más rápido en instrumentos de corto plazo, como depósitos a plazo y tarjetas de crédito. A más largo plazo, por ejemplo en créditos hipotecarios, dicen que el efecto es más atenuado y está mayormente internalizado.
  • Para la Bolsa podría haber un efecto negativo, en la medida que se internalice que la actividad se frenará con mayor fuerza hacia el próximo año.

¿Seguirá subiendo? En su comunicado, el Central dijo que, con este aumento, la tasa se sitúa en torno al borde superior del corredor de tasa del último Informe de Política Monetaria. “Una nueva evaluación de la trayectoria de la política monetaria se realizará en el próximo IPoM”, agrega. Esto último deja el panorama abierto, pues hasta la reunión anterior, seguía anticipando más aumentos.

Los economistas difieren respecto de la trayectoria.

  • Para el economista de Clapes UC, Hermann González, con este movimiento “el Banco Central está cerca del término del proceso de alzas de tasas”. Destaca que si bien este viernes habría un nuevo alto IPC, el ente rector evaluará en su próximo IPoM el escenario macroeconómico para decir cuánto más subirá.
  • Patricio Rojas, de Rojas y Asociados, estima que con la TPM en 8,25% “ha llegado el momento en que Banco Central se tome una pausa y evalúe el impacto que está teniendo la política monetaria”. Argumenta que la liquidez de los retiros de fondos de pensiones y los IFEs ya está en retirada y la actividad se está desacelerando. “No puede seguir reaccionando con aumentos de este nivel con cada IPC que sorprenda al alza”, sostuvo.
  • Una visión distinta tiene el economista Alejandro Fernández, de Gemines, quien señaló que “queda claro que el Banco Central está preocupado por la inflación y el desanclaje de las expectativas, por lo que hoy no podemos descartar que la tasa pueda llegar a 10%. El IPC de abril será una señal clara de alta inflación. Yo estoy trabajando con una tasa que llega a entre 9% y 10%”. (DF-Ex Ante)

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