Hoy, el movimiento «Ciudadanos somos Todos» -la fusión entre los partidos Ciudadanos y Todos- tendrá un encuentro programático donde se decidirá qué tipo de acuerdos establece con el oficialismo.
Aunque la instancia no es resolutiva, dará luces del camino del nuevo referente. Sin embargo, ya hay un sector que decidió ingresar al Gobierno: son diez figuras que aseguran que están «por sumar, y no restar».
Además de Sebastián Sichel, quien asumió como vicepresidente ejecutivo de Corfo, personeros como la experta en educación Sylvia Eyzaguirre, el empresario Jorge Errázuriz, el ex ministro de energía Alejandro Jadresic y el ex director de Enami, Patricio Artiagoitía, definieron que aportarán en lo que el Gobierno les pida, especialmente en los cinco acuerdos nacionales a los que convocó el Presidente Sebastián Piñera.
También se suman el ex director de INP Ernesto Evans; el ex director del SII Ricardo Escobar; la directora de BancoEstado, Paola Assael; Patricio Arrau, Andrés Baytelman y Juan Ignacio Correa.
La decisión -explican- se basa en que consideran que se debe fortalecer el centro político y que el sector aporta más uniéndose al Gobierno que desde un camino solitario. Eso sí, dejan claro que esto no significa pasar a ser parte de Chile Vamos.
«Ciudadanos es un partido liberal de centro. Nos fue mal en la elección, pero hay mucha gente que está en esa posición. Está claro que el mandato que recibió Piñera no fue de derecha, es de centroderecha y de centro. Nosotros estamos interpretando a la mayoría del país que quiere que al país le vaya bien», señala Errázuriz.
Asimismo, Jadresic explica que el paso que da el grupo es «consistente» con la decisión que tomaron el año pasado al apoyar la candidatura de Sebastián Piñera en segunda vuelta. «Ahí, de alguna manera, tomamos un compromiso de colaborar para que al Gobierno le vaya bien. Tras el llamado a formar acuerdos pensamos que como grupo nos correspondía colaborar en distintas funciones», dice.
Por ahora, la mayoría no tiene contemplado tomar un rol específico en el Ejecutivo, pero sí, por ejemplo, Artiagoitía sería llamado para conformar el directorio de una empresa estatal.
En tanto, Sylvia Eyzaguirre explica que su posición es la de colaborar para que «al país le vaya bien», pero no necesariamente desde un cargo específico. «Hay muchas otras formas», anticipa.
FRICCIÓN CON VELASCO
«Queremos un centro relevante, no un centro impoluto e irrelevante, que es a lo que conduce estar siempre aislados. Tratar de sumar con Evópoli, con la gente que se ha ido desmembrando de la DC y crear volumen en un espacio desde donde podríamos colaborar», sostiene Artiagoitía.
Es justamente este argumento el que distancia al grupo del otro sector que conforma Ciudadanos somos Todos, y que lidera el ex candidato presidencial Andrés Velasco.
El ex ministro ha señalado que el referente no forma parte del Gobierno y que su rol es hacer oposición «constructiva».
Precisamente esas dos visiones se enfrentarán en dos meses más, cuando se realicen las elecciones internas. El grupo que decidió colaborar ya prepara una lista para competir por la directiva.
«Dentro de Ciudadanos hay distintas posiciones respecto de cómo se quieren posicionar frente al Gobierno. Hay algunos que hablan de oposición positiva, otros de ser oposición crítica, otros de colaboración crítica, otros de colaboración propositiva», afirma Eyzaguirre, y agrega: «Cómo queda Velasco en esta situación, se va a saber cuando haya elecciones del partido y veamos qué decisión toma».
«Él llamó a votar nulo y a ser oposición. Eso no nos representa, y la mejor manera de dirimir ese tema es con una votación cuando se elija la nueva directiva», complementa Errázuriz.
En este enfrenamiento de posiciones algunos enfatizan que se debe reconstituir el centro político con colaboración, y no «con proyectos personales». En esa línea, afirman que el programa de Gobierno -en el cual participaron varios, como Eyzaguirre en educación- contiene ideas de centro.
De hecho, aseguran que hoy están más cerca del ideario de Evópoli que del de los partidos que forman la oposición. «Estamos muy cercanos a las posiciones de Evópoli, pero no somos ni pretendemos ser de Chile Vamos. Es ampliar el apoyo, estamos por sumar y no restar», plantea Errázuriz. (El Mercurio)


