El rector de la Universidad Adolfo Ibáñez, Francisco Covarrubias, lanzó una fuerte advertencia sobre el fenómeno del candidato libertario Johannes Kaiser, señalando que su ascenso y un eventual paso a segunda vuelta podría derivar en un triunfo de la abanderada del oficialismo, Jeannette Jara. Covarrubias alertó sobre el riesgo de que la derecha caiga en una «borrachera» si el resultado del 16 de noviembre es demasiado favorable, comparándola con el «estallido de cuello y corbata» que experimentó la izquierda con el estallido social.
El rector atribuye el éxito de Kaiser a dos factores: la velocidad de las campañas influenciadas por las redes sociales y un lenguaje directo con habilidades comunicacionales que levanta banderas claras en un Chile que, a su juicio, se ha derechizado. Según Covarrubias, Kaiser llenó el vacío dejado por sus contendores: Evelyn Matthei ha sido «poco clara» al no generar un domicilio político definido, mientras que José Antonio Kast se «empezó a cuidar» de las banderas valóricas tras la experiencia de la elección anterior.
Kaiser, en este contexto, ha «corrido el cerco» al plantear temas que se creían superados, como las declaraciones sobre Bolivia, el trabajo forzado y la reivindicación de la estrofa de Pinochet en el himno nacional, permitiendo «sacar la foto de Pinochet del cajón». Covarrubias identifica el fenómeno Kaiser como una amalgama de «novedad y dureza», que ha reemplazado los referentes de Ronald Reagan y Margaret Thatcher en la derecha por figuras como Bukele y Milei.
El académico sostiene que Kast se encuentra a medio camino entre estos dos mundos, lo que le permitiría lograr una mayoría en un eventual balotaje, pero lo expone a un riesgo de «sorpasso» en primera vuelta. La derecha que representa Kaiser es catalogada como «ilibera» y «primitiva», caracterizada por una reivindicación del orden a toda prueba y un conservadurismo valórico en su versión más cruda.
Covarrubias advierte que, si bien la democracia no está en peligro inminente, sí existe un riesgo de retroceso en la concepción liberal de la democracia, algo que representa Kaiser, en menor medida Kast, y «fuertemente Jara». El rector sostiene que reivindicar el comunismo es, en su versión más benigna, una frivolidad, y en la más compleja, una ideología que atenta contra las libertades.
El rector enfatiza que el mayor riesgo para la derecha es caer en el «mismo espíritu refundacional» que afectó a la izquierda, asumiendo que el país es completamente de derecha. Hizo un llamado a Chile Vamos para que actúe como «factor moderador» en el Congreso, evitando ejercer una eventual mayoría sin considerar a las minorías. Sobre un posible apoyo a Kast o Kaiser en segunda vuelta, indicó que si bien la votación de Matthei se trasladaría automáticamente por estrategia electoral, Chile Vamos debe «marcar una definición» y no sumarse sin condiciones.
En otro flanco, Covarrubias abordó la reforma educacional, calificando el proyecto de Fondo Solidario de Educación (FES) como un «misil a las universidades de calidad». Argumentó que el proyecto quita autonomía, fija precios y es perjudicial para los estudiantes, proyectando un colapso del sistema si solo es utilizado por quienes proyectan ingresos bajos. (NP-Gemini-La Tercera)
