El general Javier Iturriaga, representante del Ejército de Chile, encendió las alarmas en la segunda subcomisión mixta de Presupuesto al revelar un alarmante déficit de $40.000 millones, asegurando que la institución no tiene cómo cubrir ciertos gastos, incluyendo las remuneraciones de su personal. Las palabras de Iturriaga fueron contundentes: “Indudablemente que no estamos en condiciones de terminar el año. Es algo que se ha venido hablando, nuestras autoridades lo conocen e indudablemente debiéramos abordarlo porque no tenemos ninguna solución”.
El inédito desfinanciamiento ha provocado una inmediata reacción en el ámbito de la defensa y la seguridad. El experto Richard Kouyoumdjian, en entrevista con El Líbero, calificó el hecho como “sin precedente en el país” y lo enmarcó como “otra muestra de la inoperancia del gobierno de poder manejar y administrar Chile”.
Kouyoumdjian, también concejal de Las Condes, acusó al Ejecutivo de conocer la situación sin tomar acciones. Criticó la prioridad del Presidente Gabriel Boric de buscar el despliegue de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) en labores de seguridad interior sin pasar por el Congreso, mientras mantiene al Ejército «desfinanciado». «Por un lado este señor está preocupado de ir a sacarse fotos en Colchane, pero por otro lado tiene al Ejército desfinanciado”, sostuvo, aludiendo al reciente viaje del mandatario a la zona norte para el lanzamiento de planes de seguridad fronteriza.
El especialista enfatizó que, si bien lo urgente es solucionar el déficit en lo inmediato, el país no debe descuidar la inversión en capacidades estratégicas. Advirtió que, en el caso de la Marina, la falta de construcción o compra de buques en mejor estado podría significar que Chile se quede “sin escuadra y sin fuerza de submarinos de aquí al 2040”.
El experto en defensa afirmó que nunca antes en los últimos 30 años el Ejército se había quedado sin financiamiento para terminar el año. Aunque ve el déficit como un reflejo de la realidad económica y financiera del país, también identifica un componente ideológico en las decisiones de la administración actual. Según Kouyoumdjian, el Gobierno habría preferido proteger los presupuestos de ministerios como Cultura, Desarrollo Social, Salud y Educación, mientras que las FF.AA. no reciben los recursos necesarios, pese a que “habiendo plata en este país para gastar en otras cosas, las FF.AA. no reciben la caja”.
Respecto a cómo se llegó a esta situación, Kouyoumdjian apuntó directamente a un “desorden de Hacienda” y criticó duramente a la Ministra de Defensa (Adriana Delpiano), calificándola de «asistente social» que no sabe de defensa, y a sus subsecretarios por ineficacia y preocupación por temas ideológicos. Sostuvo que la situación se agrava por la jerarquía y disciplina de las FF.AA., que les impide denunciar públicamente la falta de recursos, a diferencia de otros servicios.
El analista elevó el tono de la advertencia al señalar que “la ministra de Defensa está arriesgando una acusación constitucional en este minuto si no toma acciones inmediatas para asegurar que, venga de donde venga, al Ejército y a la Marina le lleguen los recursos”. Cuestionó la respuesta de la ministra, quien había derivado la responsabilidad a la administración anterior o a una transferencia pendiente del Ministerio del Interior.
Finalmente, Kouyoumdjian subrayó las graves implicaciones para la seguridad nacional y para el personal de las FF.AA. El recorte, sumado a la imposición de tareas adicionales como el despliegue en la Macrozona Sur y la frontera norte sin asignaciones especiales, resulta “muy desmotivante”, afectando a familias enteras y arriesgando una fuga de personal capacitado al sector privado. El experto urgió a diputados y senadores a «forzar al gobierno» a suplementar los fondos para cubrir el déficit de este año y evitar un déficit proyectado de $50.000 millones para 2026. (NP-Gemini-El Líbero)



