El mandatario iraní, Masud Pezeshkian, afirmó este sábado que su país enfrenta una ofensiva coordinada por parte de Estados Unidos, Israel y las potencias europeas. Según el líder, el objetivo de este asedio es desestabilizar a Teherán en todos los frentes posibles para impedir que la nación permanezca en pie
Pezeshkian calificó la situación actual como una confrontación más compleja que el conflicto con Irak en los años 80. En una entrevista publicada en el portal del líder supremo Ali Jameneí, sostuvo que el país está siendo cercado mediante presiones económicas, culturales, políticas y de seguridad.
La economía de la República Islámica atraviesa una crisis profunda debido a las sanciones internacionales lideradas por Alemania, Francia y el Reino Unido. Los indicadores reflejan un escenario crítico para la población:
Este clima de tensión escaló tras la guerra de 12 días librada contra Israel en junio pasado. En dicho conflicto, los bombardeos sobre instalaciones atómicas y militares causaron más de 1.000 muertes en Irán, incluyendo a científicos clave y altos mandos militares.
NEGOCIACIONES NUCLEARES
La intervención de Estados Unidos, que incluyó ataques directos a tres plantas nucleares iraníes, ha congelado cualquier posibilidad de diálogo diplomático. Teherán se niega a reanudar las conversaciones ante lo que califica como demandas excesivas por parte de la Casa Blanca.
Washington exige el cese del enriquecimiento de uranio y la limitación del alcance de los misiles iraníes. Asimismo, condiciona cualquier acuerdo al fin del respaldo financiero y militar de Irán a grupos regionales como Hizbulá y Hamás, puntos que la administración de Pezeshkian considera innegociables bajo la actual presión externa. (NP-Gemini-Emol-EFE)



