En la tarde de ayer, comenzó la primera jornada del XXX Congreso del Partido Socialista, realizado en la Escuela de Artes y Oficios de la Usach. El evento -que lleva por nombre Michelle Peña, detenida desaparecida que colaboró con la primera dirección clandestina del PS tras el golpe de Estado de 1973- es la máxima instancia resolutiva de la colectividad, con mandato para modificar desde su declaración de principios hasta los estatutos internos.
Por lo mismo, su dinámica previa implica que los distintos militantes y tendencias que cohabitan en el socialismo propongan documentos con propuestas para discutir en la deliberación del congreso. Este fue el caso de una petición que se conecta con la discusión que hubo en la tramitación de la nueva Ley de Partidos Políticos, despachada esta semana desde el Parlamento.
En concreto, el presidente del tribunal supremo del PS, Sergio Barría, difundió un documento titulado “Propuesta de Organización”, en el que plantea modificar el sistema de elección indirecta que rige actualmente en la colectividad para escoger a la directiva del partido.
“Las elecciones de direcciones partidarias serán directas, bajo el principio de un hombre un voto, eligiéndose nacionalmente las autoridades unipersonales en una cédula; vale decir, se elegirán un presidente, un secretario general, una vicepresidenta de la mujer y cuatro vicepresidentes, constituyendo estas autoridades la mesa del partido junto al presidente de la Juventud”, dice un extracto del escrito, que se someterá a discusión para ver si se aprueba o se rechaza en el cónclave.
“Propongo que la dirección del partido sea electa con un sistema directo, porque es mucho más democrático. Y lo hago de cara al congreso (del PS), que es la instancia donde se pueden cambiar los estatutos”, dijo Barría sobre su planteamiento, que generó sorpresa entre quienes están enterados de su ofensiva.
Su propuesta contradice lo expresado por la presidenta del PS, Isabel Allende, quien ha defendido públicamente el sistema indirecto de elección que existe en el partido: tras la conformación de un comité central, es esta estructura (integrada por poco más de 100 personas) la encargada de elegir a los miembros de la mesa.
“Nadie me va a decir a mí que nuestro sistema es menos democrático”, fue una de las frases que lanzó la senadora cuando se tramitaba esta semana la Ley de Partidos. Esto, ante un artículo aprobado en la Comisión de Probidad de la Cámara Alta que amenazaba con forzar al PS y al PC a modificar sus esquemas de elección interna. Así, Allende pedía “respeto” a la tradición orgánica del socialismo.
Con todo, el proyecto fue modificado en la comisión mixta de diputados y senadores, con una fórmula intermedia que mantiene la elección indirecta de las directivas, bajo el requisito de que, en ese caso, los miembros que integran el órgano intermedio (como el comité central) sean electos a través de la fórmula “un militante, un voto”.
La cita se extenderá hasta mañana. Y otro tema que marcará parte del evento será el debate presidencial, considerando las opciones de Ricardo Lagos y de la propia Allende, quien reiteró ayer, en su discurso inaugural, la necesidad de contar con un candidato del partido
