No obstante esta postura, el ex mandatario sí aprovecha de referirse, aunque sea someramente de los otros postulantes que ya están en carrera.
Por ejemplo, consultado respecto de Alejandro Guillier y si es que, en las palabras del senador Ignacio Walker (DC) era posible ver en él el germen del populismo, Piñera rechaza entrar en descalificaciones, pero sí especifica que “la demagogia y el populismo son un peligro permanente en este país, especialmente hoy que Chile está desconcertado, que los liderazgos no están claros”.
Además se le consulta respecto del regreso de Carlos Larraín a la primera línea de Renovación Nacional, y estima que esta llegada no significa un freno a su posible candidatura. Incluso estima que no siente que él será el generalísimo de Ossandón dentro del partido.
Respecto de José Miguel Insulza, quien dejó la semana pasada el cargo de agente chileno ante La Haya para posiblemente participar como candidato presidencial, Piñera descarta referirse a si éste complicará la opción de lagos. “Déjemoslos a ellos arreglar sus propios problemas. No me pida a mí sumarme a eso”.

No obstante, el que hoy se erige como su más probable contrincante,Ricardo Lagos, indica que le tiene “respeto y aprecio (….) a veces los candidatos piensan que tienen que hacer es destruirse unos con otros, descalificarse, por lo tanto yo no voy a caer en la tentación de un ring de box, y empezar a pegarle a todo el que se pone por el frente”.
Sí especifica que tiene “grandes diferencias con el ex Presidente Lagos, y son conocidas, y las hemos dado a conocer, a lo largo de nuestras vidas. Pero sí puedo decir que tengo grandes ventajas sobre el Presidente Lagos: soy más joven, tengo más pelo, soy más deportista, etc.”. (Pulso-El Dínamo)

