El senador Manuel José Ossandón (RN) es considerado uno de los liderazgos “díscolos” en la derecha, pero “la que tiene las manos limpias, la que busca que se dignifique la política, una derecha que busque que existan políticas trascendentes”, según el mismo aspirante afirma. Y de ella quiere ser, al menos, precandidato presidencial.
-Desde la derecha política el senador Iván Moreira señaló que su eventual candidatura ería un «chiste de mal gusto»; la excandidata a la Evelyn Matthei lo ha llamado a «quedarse callado». ¿Qué no les gusta o qué quieren callar?
-Yo creo que eso hay que preguntárselos a ellos… Uno tiene que contestar depende de quién venga y me da la impresión que a ninguna de las personas que usted me nombra vale la pena contestarle, no hay que gastar saliva.
-Entonces, de resultar elegido Presidente, ¿con quién pretende gobernar?
-Creo que hoy en Chile tenemos que tratar de ampliar el espectro lo más posible hacia gente que entienda que lo más importante es cumplir con los objetivos. Por ejemplo, aquí se discute el tema de las AFP o de las pensiones y nunca se pone en primera línea que el sistema, sea cual sea, de reparto o AFP o el que quiera, cumpla con su objetivo, que no es otro que el que existan pensiones dignas.
-¿Pero en concreto, con quién gobernaría?
-Yo creo que en Chile hay mucha gente de partidos políticos como también independientes, gente común y corriente, que está dispuesta a trabajar por Chile. Cuando tú estás en un hospital, no te importa que el médico sea designado por el PPD o por la UDI, tú quieres que te atienda o que te opere porque esa persona sabe operar. Eso es lo que hay que hacer y para eso hay que cambiar la lógica que ha llevado tantos años a este país a lo que estamos hoy, que los del frente son malos y eso ya no da para más.
-Hoy existe un gran desprestigio de la política y los políticos. ¿Cómo pretende recuperar la confianza de la gente?
-Primero, diciendo la verdad, con las manos limpias y con la verdad. Señores, esto se puede y esto no se puede y si se puede es en un plazo razonable, sin mentir. Por razones demagógicas y electorales siempre andamos prometiendo cosas que no se van a cumplir, ese es el desprestigio de la política. Si alguien dijo que la puerta giratoria se iba a acabar, la puerta se acaba y no que se roben la puerta.
-A propósito de «puertas giratorias», ¿qué pasa con sus socios, la UDI, que resultaron ser más piñerista que RN?
-La UDI y todos van a apoyar a quien gane en la cancha. No quiero que usen proyectos de ley ni excusas para sacarme por secretaría. Entremos a la cancha, al que gane lo vamos a apoyar todos.
-Usted ha señalado que no está dispuesto a ser bajado por secretaría. Legalmente existen plazos, ¿espera contar con las firmas para levantar una candidatura independiente?
-De todas maneras. Si no soy capaz de cumplir con las firmas (35 mil), menos voy a ser capaz de ser Presidente. Si no soy capaz de ganarle a Piñera en la primaria, menos voy a ser Presidente. No es un juguete el que yo quiera tener un letrero que diga que soy candidato presidencial. No. Es porque creo que podemos hacerlo bien y trabajar y hacer un cambio profundo en la política chilena, por lo tanto, si hay que juntar firmas las vamos a juntar, pero espero que existan primarias, transparentes. Eso es lo que quiero, pero por secretaría no me van a bajar.
-¿Qué lo diferencia a usted de Sebastián Piñera?
-(Silencio) Bueno, nosotros representamos dos derechas distintas. Él es una derecha económica y yo soy una derecha mucho más socialcristiana, en el sentido de un cristianismo con los valores universales. Yo creo en el crecimiento y en el empleo. Son súper importantes, pero no creo en la política del chorreo o el crecimiento solamente económico. La gente quiere ser feliz. Tengo mucha gente en La Pintana, Pedro Aguirre Cerda, Puente Alto y en muchas comunas que tienen una casa modesta, bonita, impecable y que se sienten millonarios, y tengo amigos que viven en Las Condes, La Dehesa, con tremendas casas y se sienten quebrados. Tenemos que tener una derecha que busque que en este país todos participemos del sistema, todos…
-¿Todos? Hace pocos días, cuando se fotografió con candidatos de su sector, apareció un lema que, aunque usted dice que no es suyo, lo hizo suyo, el de las «manos limpias». Derechamente, ¿va ese mensaje a Sebastián Piñera?
(Nuevamente silencio) El que crea que el sombrero le queda bien, que se lo ponga. Yo tengo las manos limpias… Yo creo que en política la gente quiere gente honrada, con las manos limpias. Da lo mismo que no sea ni el más preparado ni el súper dotado, pero importa que se esté dispuesto a jugarse por la gente. Ahora, si alguien cree que lo están afectando lo que digo es porque debe tener algún problema interior.
-Los sectores más extremos en la derecha no quieren una nueva Constitución y usted sí cree que es necesario participar. ¿Tiene Chile Vamos el peso para parar un proceso que respalda cerca del 70% de la población?
-Yo creo que hay que meterse a la cancha por realismo político. Si esta nueva Constitución la hacemos bien va a ser una herramienta para mejorar lo que teníamos tapado, pues éramos un país que creía que no había corrupción, que las instituciones funcionaban correctamente y parece que no es así. El gobierno lo ha hecho muy mal, en forma ideológica, tratando de arrasar con los del frente y eso no funciona. Tampoco el quedarse afuera, ese fue un error político garrafal.
-Hace pocos días, cuando Jovino Novoa declaró que «no había faltas de probidad», usted le respondió: «Me parece ridículo, impresentable, es como que parece que lo condenaron por feo». ¿Se les está «desgranando el choclo»? Porque cada día se suman nuevas renuncias de personeros, tampoco contarán con el financiamiento de que disponían, la gente los evalúa mal…
-No creo que la UDI se acabe, por ahora no, porque en la UDI hay mucha gente joven, distinta, que no está metida en esas cosas y en el momento en que tomen las riendas van a producir un cambio. No hay que demonizar a la mayoría de los militantes de un partido porque un grupo de personas hizo mal el tema.
-Durante su campaña senatorial usted denunció que empresarios se coludieron para evitar que fuera electo. En las siguientes presidenciales ¿por qué usted cree que sí lo apoyarán y no a Piñera, por ejemplo?
-No pues, si la derecha económica va a apoyar a Piñera, pero en el minuto que yo le gane van a tener que sumarse. (Cambio 21)
