Quisiera complementar la excelente carta de Gerardo Varela con algunos datos que obligan a evaluar la entrega de más recursos al Estado solo para mostrarse “dialogante” y “prudente”.
El Ministerio de Salud aumentó su presupuesto en un 48% entre 2014 y 2024, sumando US$ 12.544 millones por año. ¿Mejoró la calidad del servicio en esa magnitud? Todo indica que no. De hecho las listas de esperan crecieron un 70%.
En educación y trabajo, los presupuestos ministeriales aumentaron un 45% y 42% entre 2014 y 2024 y tampoco vemos mejoramientos acordes con ese enorme volumen de plata. El último informe de la OCDE sobre educación es lapidario.
Quienes defienden los acuerdos a todo evento, omiten sus consecuencias y suelen descalificar a quienes los ponen en duda. La carta de Pablo Ortúzar rebatiendo a Varela es un ejemplo: repleta de juicios de valor, pero sin ninguna evidencia que respalde sus dichos.
Aprovechar el momento para lograr un acuerdo con las izquierdas ante un futuro incierto —como propone Ortúzar— fue el mismo criterio que nos metió en el segundo proceso constitucional fracasado. (El Mercurio Cartas)
Iván Poduje Capdeville
