El viernes a primera hora de la mañana, los medios de comunicación que llegaron hasta el estadio San Jorge de BancoEstado para cubiri la reunión de la Presidenta Michelle Bachelet con sus ministros, dieron cuenta de la decisión del gobierno de lanzar un nuevo eslogan, el que marcaría el inicio del segundo tiempo del Ejecutivo, bajo la frase “Todos x Chile!”.
Prácticamente todo el gabinete de secretarios de Estado, así como también funcionarios del Ejecutivo se enteraron de la nueva campaña.
La sorpresa llegó incluso hasta Carlos Correa, director subrogante de la Secretaria de Comunicaciones (Secom), división encargada de la difusión pública del gobierno.
Altas fuentes de Palacio señalaron que el Ministerio Secretaria General de Gobierno -a cargo de Marcelo Díaz- marginó a Correa del cambio de eslogan, algo que, agregan las mismas fuentes, gatilló su molestia y posterior renuncia tras 16 meses de gestión.
Correa primero asumió como subdirector de esta división, y luego, tras la salida de Paula Walker como directora el 11 de marzo, asumió la cabeza de manera temporal.
La decisión de darle un giro a la expresión comunicacional del gobierno se tomó hace poco más de tres semanas, en medio del trabajo que realizó la Presidenta Bachelet junto con el comité político para definir la nueva hoja de ruta que fue presentada el viernes al resto del gabinete, y luego el sábado a los presidentes de partidos de la Nueva Mayoría.
Así, fue el ministro Díaz el encargado de generar este nuevo material, el que fue visado por la Presidenta y el ministro Burgos previo a su presentación oficial.
La agencia contratada para crear esta frase fue Felicidad, de propiedad de Piedad Rivadeneira. La publicista es un rostro conocido en los partidos de la ex Concertación, ya que en 2009 trabajó en la apuesta gráfica de la campaña presidencial de Eduardo Frei.
De hecho, el logo Todos X Chile!, tiene características muy similares al usado justamente para la campaña del entonces abanderado DC: ¡Todos por Chile, Todos por Frei!.

Más allá de la semejanza en la frase, también se pueden identificar similitudes en el diseño de las letras, así como también en los colores: en ambos se utiliza rojo y azul.
Ayer, el propio ministro Díaz confirmó desde La Moneda que el costo de este trabajo fue “del orden de los $20 millones”. Junto a esto, el secretario de Estado aclaró que este pago correspondía además a un conjunto de estudios que tienen que ver con la imagen y el posicionamiento comunicacional del gobierno.
La elección de Felicidad se hizo a través de un trato directo y no una licitación. Esto, aseguraron en Segegob, porque las compañías disponibles para esta tarea, que son parte del denominado “convenio marco”, no cumplían con los requisitos concretos.
La nueva frase quedó plasmada en distintas gigantografías usadas en la reunión del viernes; había una a la entrada, otra en la sala de trabajo de la Presidenta y sus ministros, y una última como telón de fondo para la foto oficial de la cita.
Junto a esto, se imprimieron chapitas y cuadernos con el logo, los que fueron entregados a los ministros y asesores gubernamentales, así como también a los presidentes de partidos y secretarios generales del oficialismo en el encuentro del sábado. Todo este despliegue fue calificado por el gobierno como una forma de marcar un hito comunicacional para esta nueva etapa.
Reemplazo en Secom
Ayer, el ministro Díaz aseguró que durante los próximos días se oficializará la llegada de un nuevo director de la Secom, posición que suma más de cuatro meses de vacancia.
Junto a esto, el secretario de Estado confirmó que su cartera está trabajando en la elaboración de un nuevo diseño de comunicaciones, el que sería implementado durante los próximos meses.
Una de las autocríticas que realizó la Presidenta el viernes fue que su gobierno ha tenido “debilidades comunicacionales”. Este punto es uno de los que ha generado mayores críticas por parte del oficialismo hacia el gobierno, argumentando que ha sido el propio Ejecutivo el que no ha sido capaz de informar correctamente las cualidades de las reformas.


