El ministro de Hacienda, Nicolás Grau, consiguió un triunfo político al lograr el despacho del proyecto de Ley de Presupuestos 2026 por parte del Congreso, tres días antes de la fecha límite del 29 de noviembre. Grau aseguró estar «tranquilo» y calificó el resultado final como «un buen presupuesto para el país, mejor que el que ingresamos». Si bien la estructura central del proyecto se mantuvo, se incorporaron ajustes relevantes durante la tramitación.
AJUSTES Y PRIORIDADES DE GASTOS
Grau destacó que el cambio más significativo introducido en la Comisión Mixta, y que fue ratificado por ambas Cámaras, fue el aumento del gasto en seguridad, que se financió mediante una reducción del incremento presupuestario destinado al Ministerio de las Culturas. Sin embargo, el presupuesto que experimenta el mayor crecimiento es el de Salud, que aumentará en más de US$900 millones. El ministro subrayó que, al finalizar el actual gobierno, el gasto en Salud habrá aumentado en más de un punto del Producto Interno Bruto (PIB).
DISCIPLINA FISCAL Y CRITICAS DE LA OPOSICIÓN
El titular de Hacienda defendió la disciplina fiscal de la actual administración, señalando que con este presupuesto el crecimiento real promedio del gasto del gobierno de Gabriel Boric se habrá situado en torno a 2,4 puntos del PIB por año, una cifra significativamente menor a los 5 puntos anuales que se registraban históricamente antes de su mandato. Grau enfatizó que «el gasto ha aumentado durante nuestro período la mitad de lo que estaba aumentando antes», y que el crecimiento de la deuda pública durante su administración será el menor desde el primer gobierno de la expresidenta Bachelet.
La oposición había mantenido críticas durante la tramitación, principalmente debido a las dudas sobre las proyecciones de ingresos y gastos de la Dirección de Presupuestos (Dipres), considerando los errores en los cálculos para el erario de 2025. Los partidos opositores solicitaron un recorte adicional de US$1.500 millones, lo cual fue descartado. Grau explicó que se logró convencer a la oposición al demostrar «partida por partida, lo difícil que hubiese sido hacer una reducción de gasto mayor», argumentando que el incremento ya era acotado y que el país ha comenzado a gastar «al ritmo que crece la economía», algo que no se hacía en los 15 años anteriores. Pese al logro, el ministro reconoció que el país «sigue en una situación de estrechez fiscal» y la próxima administración deberá continuar con los esfuerzos para reforzar la disciplina fiscal. (NP-Gemini-Emol)
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