En una declaración pública, siete ex ministros de Relaciones Exteriores de Chile manifestaron su inquietud ante las recientes propuestas del candidato presidencial José Antonio Kast en materia migratoria, señalando posibles impactos negativos en la dignidad de las personas migrantes y en las relaciones bilaterales con Perú y Bolivia.
Los ex cancilleres destacaron que la política migratoria chilena debe respetar el Estado de Derecho y las obligaciones internacionales en derechos humanos, refugio y protección de personas vulnerables. Criticaron las propuestas de expulsiones masivas y confinamiento de migrantes, calificándolas como incompatibles con la dignidad humana y los estándares internacionales.
Asimismo, subrayaron la importancia de mantener relaciones de cooperación y buena vecindad con Perú y Bolivia, especialmente en temas transfronterizos como la migración irregular y el crimen organizado. Advirtieron que medidas como «empujar» migrantes hacia fronteras vecinas sin acuerdos bilaterales podrían dañar la confianza mutua y los espacios de diálogo construidos durante décadas.
Los firmantes reconocieron la necesidad de abordar la inmigración irregular, pero cuestionaron la viabilidad logística, financiera y diplomática de las propuestas de Kast, como la expulsión de 350.000 personas. Enfatizaron que estas medidas no ofrecen soluciones reales ni sostenibles, y podrían generar crisis humanitarias en las fronteras.
La declaración abogó por respuestas firmes pero viables, basadas en acuerdos con países vecinos y en el derecho internacional. Propusieron fortalecer la diplomacia, activar comités de frontera, perfeccionar acuerdos de retorno y diseñar mecanismos conjuntos de regularización y control migratorio con Perú y Bolivia.
Finalmente, los ex cancilleres instaron a un debate serio y responsable sobre migración y seguridad, alejado de la desinformación y el temor. Rechazaron propuestas que ignoren las limitaciones prácticas y jurídicas de expulsiones masivas, y que tensionen innecesariamente las relaciones bilaterales. Subrayaron que la política migratoria debe respetar la dignidad humana y buscar soluciones acordes con ella.
La declaración fue firmada por Soledad Alvear, Mariano Fernández, José Miguel Insulza, Heraldo Muñoz, Antonia Urrejola e Ignacio Walker. (NP-Adobe)



