La detención de Benjamín Marcelo Guerrero Cruz, un estudiante chileno de 18 años, ha generado una ola de protestas en California luego de que cumpliera casi tres meses bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). El joven, estudiante de último año de preparatoria, fue arrestado el pasado 8 de agosto mientras paseaba a su perro en Reseda, Los Ángeles.
Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), la detención se produjo porque Guerrero Cruz se quedó en el país más de dos años después de la fecha límite de su visado, incurriendo en un «abuso» del Programa de Exención de Visa (Visa Waiver Program).
Bajo el lema «Educación, no deportación», profesores del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles se manifestaron esta semana exigiendo su liberación. Los docentes y vecinos critican el trato que recibe en el Centro de Detención de Adelanto. La profesora Lizette Becerra lamentó que lo «tratan como a un prisionero», mientras que el profesor Ron Gochez pidió que se le permita terminar su último año escolar.
Familiares y vecinos, como Valerie T., quien presenció la detención, han visitado a Benjamín y denunciaron las duras condiciones de su arresto, incluyendo el hacinamiento en una celda con otras 50 personas, y la falta de higiene básica, calor y alimentación adecuada. La vecina lamentó que la experiencia está siendo «traumática» para el joven.
Benjamín Guerrero Cruz, quien reside en EE. UU. junto a su madre y hermanos (uno de 6 años y gemelos de 5 meses), permanece a la espera del proceso de deportación. En paralelo, su familia ha recurrido a una campaña en la plataforma GoFundMe para recaudar fondos, tanto para «luchar por su regreso» como para ayudarlo a «rehacer su vida si es deportado». (NP-Gemini-Emol)



