Solo dos votos le faltaron a al Gobierno para que el Senado ratificara su candidato a nuevo fiscal nacional, José Morales. El abogado recibió 31 votos a favor, seis en contra y ocho abstenciones. En estos dos últimos grupos se encontraron parlamentarios oficialistas, especialmente del PS. Uno de los que apoyaron el nombramiento fue el propio presidente de la Cámara Alta, Álvaro Elizalde.
En conversación con T13 Radio, el senador del socialista explicó que lo que sucedió ayer «forma parte de las reglas del juego democrático». Esto debido a que en el proceso de nombramiento de la cabeza del Ministerio Público concurren los tres poderes del Estado y hay que ser respetuosos con la independencia de ellos.
«Lo contrario sería pensar que alguna de estas instituciones es un buzón, y no es así», dijo el presidente de la corporación, y agregó: «Uno puede compartir o no la decisión que adoptó el Senado, pero los senadores tienen derecho a votar en conciencia».
No obstante, le quitó dramatismo a lo que fue la primera vez en la historia en que el Senado no apoya la carta presidencial para fiscal nacional: «No es primera vez que se rechaza una propuesta del presidente de la República para un nombramiento (…) por ejemplo de los ministros de la Corte Suprema, también del Contralor«, comentó, explicando que le parece desmesurado decir que fue una derrota para el Gobierno.
Si bien el propio Elizalde votó a favor de Morales, aseguró que «mi punto de vista tiene que ver también con destacar los roles que le corresponden a la institución (…) independientemente que mi postura no haya tenido la mayoría necesaria para ser ratificada».
Explicando en otras palabras que «voy a ser defensor del rol que le corresponde al Senado, aunque pueda estar en desacuerdo con la decisión que tomó la institución».
Además de rechazos y abstenciones oficialistas, algo que generó tensión entre el Ejecutivo y especialmente Alfonso De Urresti (PS), fue que este no pidió permiso constitucional para salir del país. Con eso hubiera bajado el quórum necesario para aprobar la designación.
Elizalde se refirió a la situación, argumentando que estos permisos «se solicitan cuando un parlamentario va a estar fuera del país más de 30 días (…) también existe la práctica que en viajes por menor tiempo se solicitan los permisos constitucionales, pero no es obligación en absoluto».
Y agregó que «yo creo que el senador De Urresti es una persona que en esta materia siempre actúa sobre la base de convicciones». Asimismo, aseveró que «lo que yo digo es que para criticar hay que ser primero autocrítico, y ahí me quedo porque no quiero armas una polémica».
Para finalizar, Elizalde volvió a resaltar el respeto que se debe tener por cada poder del Estado, en relación a ciertos parlamentarios que piden la renuncia a la ministra de Justicia, Marcela Ríos, por lo acontecido el día de ayer: «Yo creo que hay que ser respetuoso con lo que cada poder del estado decide (…) por ejemplo, los parlamentarios que piden la renuncia de la ministra por la decisión del Presidente o por el contrario a quienes cuestionan que un senador en conciencia vote de cierta manera».
