Elecciones en Ecuador: Arauz y Lasso disputarán la segunda vuelta

Elecciones en Ecuador: Arauz y Lasso disputarán la segunda vuelta

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Isabel de Saint Malo, jefa de la misión de observación de la OEA para las elecciones de este domingo en Ecuador, felicitó la participación ciudadana en los comicios generales pese al peligro del covid-19, que ha contagiado a más de 257.000 personas en el país suramericano.

«Quiero felicitar al pueblo ecuatoriano por este entusiasmo con el que están saliendo a votar en las condiciones que enfrentamos en este momento con una pandemia«, dijo la ex vicepresidenta panameña en uno de los recintos electorales en Quito.

Anotó que han visto «mucha gente participando y cuidándose», pues portan mascarillas y pantallas faciales. El Consejo Nacional Electoral (CNE) ha instado a la ciudadanía a acudir con mascarilla, alcohol y su propio lápiz para sufragar.

«Es un reto muy grande. Lo que yo quiero es celebrar lo que he visto en términos de la participación y la paciencia, y exhortar a los ciudadanos a que acudan temprano para que puedan ejercer el voto», anotó.

Además invitó a aquellos que aún no han salido «a que participen y que aprovechen esta oportunidad que no todos los países tienen, de salir a definir el futuro de su país seleccionando, por medio de la voluntad popular, quiénes quieren que estén al mando del gobierno por los próximos años».

Varios ciudadanos se han quejado por las largas filas existentes (algunas de más de diez cuadras), para ingresar en los recintos electorales, lo que los ha obligado a esperar hasta dos horas para ejercer su derecho al voto.

«Hemos visto filas que se están moviendo y hemos observado también la decisión que el CNE ha comunicado de ampliar el aforo y eso debe agilizar también» el proceso, comentó.

Informó de que han recibido reportes desde la mañana de retrasos en algunas mesas para instalarse, «pero escuchamos también de parte del CNE que todas las mesas se habían instalado«. «Quiero invitar a las personas a que sean pacientes, faltan varias horas. Las filas no sólo son por la afluencia de gente sino por la distancia que las personas está tomando», explicó.

Además de la OEA, el proceso electoral ecuatoriano esta vigilado por 2.134 observadores nacionales y 225 internacionales de entidades como la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) y la Asociación Mundial de Organismos Electorales.

Más de 13 millones de ecuatorianos están convocados a las urnas este domingo para designar al sucesor de Lenín Moreno en la Presidencia de la República, así como para renovar la Asamblea Nacional y para designar a sus integrantes en el Parlamento Andino.

SEGUNDA VUELTA

El economista de izquierda Andrés Arauz y el exbanquero de derecha Guillermo Lasso disputarán la presidencia de Ecuador en una segunda vuelta el 11 de abril, según anticiparon dos encuestas a boca de urna difundidas tras el cierre de los centros electorales este domingo.

Arauz, delfín del expresidente Rafael Correa (2007-2017), logró entre 34,9% y 36,2% de los sufragios y Lasso de 21% a 21,7%, de acuerdo a los sondeos de las empresas Cedatos y Clima Social, que ubican tercero al líder indígena Yaku Pérez.

El Consejo Nacional Electoral de Ecuador (CNE) reportó una alta participación del 62,34%, pese a la pandemia y la prensa ecuatoriana dio cuenta que muchas mesas se demoraron en constituirse.

“Llegué con miedo a contagiarme por esta pandemia, pero aquí estoy”, dijo a la agencia Reuters Jomaira Alvarado, una comerciante de 28 años, que emitió su voto en un centro electoral en Guayaquil. “Tengo muchas esperanzas de que finalmente podamos eliminar la sombra de los malos gobiernos”.

Una mujer emite su voto en la parroquia Tarqu en Cuenca. Foto: AFP

La segunda vuelta era un escenario que había sido previsto por los analistas y los sondeos, esto porque se habían presentado 16 candidatos y para ganar en primera vuelta, un aspirante presidencial debe obtener la mitad más uno de los votos válidos o el 40% de los sufragios y una ventaja de 10 puntos sobre su más inmediato rival.

La “dispersión de partidos y movimientos en la papeleta presidencial refleja instituciones débiles, maquinarias electorales que se activan únicamente cuando hay elecciones, donde no hay estructuras fuertes”, dijo a la agencia France Presse la politóloga Karen Garzón Sherdek, de la Universidad Internacional SEK.

Arauz, de la coalición Unión por la Esperanza (Unes), es el delfín del exmandatario Rafael Correa (2007-2017), que ahora es también un exaliado de Moreno. Ambos líderes sostienen una pugna que casi sepulta al oficialismo. El analista y consultor político Alejandro Zabala opinó a The Associated Press que Correa ha sido un actor importante en estas elecciones “porque el candidato que ellos escogieron no tiene buen discurso, tiene muchas limitaciones, por eso escondieron a Arauz y salieron con la imagen de Correa a pasearla en todo el país”.

En su discurso, Arauz  ha prometido hacer pagos directos en efectivo por unos US$ 1.000 millones a familias pobres y negó las condiciones de un paquete de financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI), de unos US$ 6.500 millones. Lasso, por su parte, se ha visto perjudicado por su imagen de banquero conservador, y los encuestadores dicen que la posibilidad de una baja participación electoral debido a la pandemia podría afectar su apoyo.

Arauz no pudo ejercer su voto en Quito debido a que estaba empadronado para hacerlo en México, donde vivía hasta poco antes de su postulación, y no cambió su domicilio electoral. El domingo optó por acompañar a su abuela Flora Galarza a votar en un centro instalado en el norte capitalino. “La respuesta de la ciudadanía ha sido abrumadora en todas las partes del país y sabemos que eso se va a reflejar en el voto ciudadano”, dijo.

El candidato presidencial, Andréz Arauz, al lado de su abuela, en el colegio electoral en Quito. Foto: Reuters

Mientras que Lasso sufragó junto a su esposa María de Lourdes Alcívar en la ciudad de Guayaquil. “Lo que les puedo decir es que habrá segunda vuelta, nosotros estaremos ahí y nos veremos con quien el pueblo decida escoger”, indicó.

Ecuador sufrió el año pasado un brutal brote de coronavirus que dejó cuerpos sin recoger en las calles de su ciudad más grande, Guayaquil. Las medidas de cuarentena golpearon aún mas la economía que ya sufría los bajos precios del petróleo, la principal exportación de Ecuador, así como fuertes recortes en el gasto público.

El presidente Lenín Moreno, un exaliado de Correa, impulsó una agenda a favor del mercado con la esperanza de revivir a una economía lenta y fuertemente endeudada. Sus esfuerzos provocaron una reacción violenta con 10 días de protestas callejeras en el 2019 contra el retiro del subsidio a los combustibles.

El candidato presidencial Guillermo Lasso levanta su papeleta antes de emitir su sufragio en Guayaquil. Foto: Reuters

El ganador de las elecciones asumirá las riendas del país el 24 de mayo. Entre sus desafíos se encuentra trabajar para sacar a la nación productora de petróleo de una crisis económica cada vez más profunda que ha sido exacerbada por la parálisis productiva y comercial causada por pandemia. Ecuador sufrió el año pasado un brutal brote de coronavirus que dejó cuerpos sin recoger en las calles de su ciudad más grande, Guayaquil. (Emol EFE La Tercera)

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