El Presidente Piñera y la Defensa Nacional

El Presidente Piñera y la Defensa Nacional

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Las filas interminables de compatriotas buscando despedir al expresidente Piñera tras su trágica muerte muestran el cariño y el agradecimiento de un país que reconoció en él un liderazgo como pocos en la historia de Chile, y cuya proyección quedará grabada a fuego en muchas generaciones y por mucho tiempo.

Una de las áreas en que dio cuenta de su visión y lideró cambios relevantes fue en la Defensa Nacional. El expresidente Piñera abogó siempre por una Defensa moderna al servicio de nuestros compatriotas, con FF.AA. que se distingan por sus altos niveles de profesionalismo, eficiencia, integridad y amor por la patria. FF.AA. que cuenten con capacidad efectiva de disuasión para resguardar nuestra soberanía e integridad territorial y con medios polivalentes para enfrentar las catástrofes en las que cumplen un rol vital.

Esto llevó a que, como gobierno, diseñáramos y aprobáramos un nuevo sistema de financiamiento de las FF.AA. que puso término a la Ley del Cobre y que asegura un presupuesto plurianual con un aporte basal que permite contar con la necesaria inversión en capacidades estratégicas.

Asimismo, se encuentran hoy en discusión en el Congreso proyectos que modernizan las compras militares, la carrera militar y el sistema nacional de inteligencia, todos los que llevan su firma.

Su visión iba más allá. Siempre nos inquirió en pensar en los desafíos de la Defensa que fueran más allá de su rol tradicional y dejar atrás los traumas que habían marcado nuestra historia reciente. Así, por ejemplo, la Política de Defensa presentada en su gobierno que consolida las misiones para la Defensa con sus FF.AA. y que requerían una estrategia con objetivos, formas de empleo esperadas, capacidades estratégicas requeridas y desafíos explícitos. Esto incluyó por cierto nuestro Territorio Chileno Antártico y áreas oceánicas, incorporando la plataforma continental, la aprobación del Estatuto Antártico Nacional y el plan de recuperación de bases antárticas.

Se impulsó también un Nuevo Sistema Nacional Satelital que por primera vez comprende una constelación integrada por numerosos satélites, cuyos beneficios llegarán a la administración del Estado, las FF.AA. y el sector privado.

La pandemia de covid-19 fue el ejemplo palmario de la polivalencia de los medios militares. El traslado de enfermos y vacunas, la disponibilidad de ventiladores mecánicos y la habilitación de hospitales de campaña dan cuenta de las capacidades que la Defensa pone al servicio del país en situaciones de crisis. Fue fundamental su apoyo en otras situaciones críticas como incendios o catástrofes, la seguridad en la macrozona sur o el resguardo fronterizo en el norte.

Finalmente nos exigió afrontar con decisión episodios que pudieran poner en cuestión la integridad en el sector, apoyando decididamente una Agenda de Probidad y Transparencia que implicó más de 10 medidas concretas para cumplir con altos estándares de probidad en las áreas más complejas, como la compra de armamento, remuneraciones y pensiones, incluso impulsando una nueva ley de gastos reservados que refuerza su buen uso conforme a las necesidades de la Defensa.

La visión y liderazgo del expresidente Piñera también son explícitos en su legado en materia de Defensa, así como en su convicción de que los objetivos se cumplen cuando se forman equipos que trabajan unidos y pensando en el interés de Chile.

Alberto Espina
Mario Desbordes
Baldo Prokurica
Exministros de Defensa Nacional

Juan Francisco Galli
Alfonso Vargas
Exsubsecretarios para las FF.AA.

Pablo Urquízar M.
Exjefe de Gabinete Ministerio de Defensa Nacional