El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, defendió enérgicamente este miércoles la legalidad de las operaciones militares de su país contra lanchas supuestamente cargadas con drogas en el Caribe, afirmando que las fuerzas armadas estadounidenses tienen pleno derecho a operar en «su hemisferio». Rubio rechazó categóricamente que Europa tenga autoridad para determinar la legalidad de estas acciones.
Tras la reunión de ministros de Exteriores del G7 en Niagara-on-the-Lake, Canadá, el secretario de Estado aseguró ante los medios de comunicación que el tema de los ataques en el Caribe, que han resultado en la muerte de decenas de personas, no fue discutido durante ninguna de las sesiones de la cumbre. Rubio se mostró tajante al negar que ningún país le planteara las acciones de Washington, a pesar de que a la reunión asistieron, además de los miembros del G7, representantes de la diplomacia europea y ministros de países como Ucrania, Brasil, México y Corea del Sur.
Cuando un periodista mencionó que la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, había cuestionado la legalidad de las operaciones, Rubio negó que la Unión Europea pueda interferir en la política de seguridad nacional de Estados Unidos. «No creo que la Unión Europea pueda determinar lo que es la ley internacional. Desde luego no pueden determinar cómo Estados Unidos defiende su seguridad nacional. Estados Unidos está siendo atacado por organizaciones criminales terroristas en nuestro hemisferio y el presidente (Donald Trump) está respondiendo en defensa de nuestro país», sentenció el Secretario de Estado.
Rubio insinuó una postura hipócrita por parte de Europa, señalando: «Me parece interesante que todos estos países quieren que les proporcionemos, por ejemplo, misiles Tomahawk con capacidad nuclear para defender Europa, pero cuando EE. UU. posiciona portaaviones en nuestro hemisferio, donde vivimos, entonces eso es un problema». Por su parte, la anfitriona de la reunión y ministra de Exteriores de Canadá, Anita Anand, confirmó que los ataques estadounidenses a las lanchas no fueron abordados en la reunión, y sostuvo que es prerrogativa de EE. UU. determinar si sus acciones se ajustan al derecho internacional. (NP-Gemini-Emol EFE)



