Director de Fonasa: «Si salud estatal no da abasto, hay que usar...

Director de Fonasa: «Si salud estatal no da abasto, hay que usar oferta privada»

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Durante el mismo lunes pasado -cuando el Gobierno presentó su «Reforma integral al sistema de salud»- comenzaron a surgir las primeras críticas a los cambios propuestos, que incluyen una modificación al funcionamiento de las isapres y el fortalecimiento al seguro público, Fonasa.

Parte de los cuestionamientos de la oposición apuntaba a que los cambios del Ejecutivo se centraban más en el sistema privado, en el cual hay 3,4 millones de beneficiarios, y no en el sector público, que tiene 14,2 millones de usuarios.

«En el mundo público, lo que tenemos que hacer es fortalecerlo. Lo que ocurre es que muchas veces las personas confunden Fonasa con el prestador. Al confundirlo, probablemente, las personas pueden pensar que quieren una modificación dentro de los hospitales y esa no es la reforma a Fonasa, porque eso no es Fonasa», plantea Marcelo Mosso, director del seguro público, en entrevista a «El Mercurio».

-¿No era necesaria, entonces, una reforma profunda a Fonasa?

«No. Si uno mira el modelo de Fonasa, es un buen modelo; es decir, tenemos un sistema con una red preferente, que es todo el sector público (…), ya es solidario, no discrimina, no tiene ninguno de los problemas que la gente le achaca al sistema privado. Desde esa perspectiva, Fonasa lo que necesitaba era un cambio en términos de tener una mirada más protagónica, y esa mirada es la que le estamos dando hoy día».

Mosso afirma que con la reforma anunciada, el seguro público pasará de ser «una caja pagadora» a ser «una institución que se preocupe de que en el servicio que se les entrega a sus beneficiarios haya el suficiente acceso, oportunidad y calidad».

CAPACIDAD DEL SECTOR PÚBLICO

Para los cambios, enuncia, habrá dos vías. Por un lado, algunos que no requieren proyecto de ley, como la creación de un nuevo programa que desde el próximo año podría comenzar a otorgar recursos a los municipios cuyos consultorios mantengan mejor controlada a su población de enfermos crónicos, convenios para que los beneficiarios tengan descuentos en farmacias y una aplicación para que sea más fácil encontrar a prestadores que atiendan por Fonasa.

En paralelo, el proyecto de ley establece que los hombres podrán ser cargas de sus cónyuges y que Fonasa podrá derivar a pacientes que estén en lista de espera por criterios sanitarios y sociales a prestadores públicos o privados.

«Esto no está pensado para entregar dinero al sector privado», dice inmediatamente al explicarlo, y agrega: «Nosotros no tenemos ese problema del sector privado-sector público. Sabemos que tenemos una red preferente que tenemos que hacer más eficiente, que es el sector público, y siempre preferirla; pero si no da abasto, hay que hacerlo en el sector privado y no tenemos problemas con eso. Al final, la gente quiere que le resuelvan el problema y no le importa dónde».

-El proyecto también considera mejorar las coberturas para quienes se vayan a atender a clínicas. ¿Se está incentivando la atención en el sector privado de los afiliados a Fonasa?

«Si yo tuviera plena capacidad en el sector público para atender todas las necesidades de Fonasa, no tendría que estar dando opciones para que la gente pudiera salir. Estas son opciones que la gente puede tomar, y lo hace porque, por ejemplo, tenemos problemas con la cantidad de especialistas.Y quiénes son los que más sufren en ese problema: la clase media».

-¿Por qué no se planteó que afiliados a isapres y Fonasa accedieran al mismo plan universal?

«Tenemos que avanzar primero en homologar nuestros propios planes (modalidad institucional versus modalidad libre elección) y después podemos pensar en lo otro. Será una discusión para más adelante, vamos arreglando los problemas que tiene cada sistema (…). Yo soy de la idea personal de que el día de mañana pueda haber un solo gran mercado; pero eso es para otra generación». (El Mercurio)

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