El Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (CRUCH) reaccionó con molestia a las palabras del sacerdote jesuita Fernando Montes quien en una entrevista a El Mercurio el domingo pasado se quejó por la exclusión de la promesa de gratuidad que anunció la Presidenta Michelle Bachelet a partir de 2016, al 60% de los alumnos vulnerables, pero sólo a los matriculados en los 25 planteles pertenecientes a este grupo.
¿Por qué somos excluidos? No deseo ofender, pero pienso que se asemeja a un cartel con enorme poder de lobby (…) lobbies muy poderosos, más centrados en el dinero que en la calidad y la equidad”, fueron las palabras de Montes, que esta mañana respondió el rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, además vicepresidente del CRUCH, “Sus dichos sobre el Cruch son al menos imprudentes y temerarios, pues nos acusa de lobby y de ser un cartel. Una de las acepciones de este último sustantivo se refiere a una agrupación que persigue fines ilícitos. En consecuencia, lo que cabe es llamarlo a la responsabilidad”, dijo Valle según consigna Cooperativa.
“Si (Montes) conoce acciones de lobby y tiene pruebas de que constituimos un cartel, debería hacer las denuncias ante las autoridades competentes. En caso contrario, debe excusarse públicamente”, agregó el académico.
Sin embargo el sacerdote insisitió en sus palabras. —Lobby no necesariamente es malo, pero este lobby del Cruch lo cuestiono porque es demasiado defensor de su propia causa, que no es justa. Y es demasiado evidente el lobby, es público, si este grupo de presión funciona nada menos que en el propio edificio del Ministerio de Educación, hace declaraciones en conjunto y pesa enormemente en las autoridades” afirmó el rector de la Universidad Alberto Hurtado a La Segunda.
Montes recibió apoyo de otros rectores de universidades privadas como Rubén Covarrubias de la Universidad Mayor. “Una vez más hay una discriminación odiosa a los alumnos que no pertenecen a las universidades del Cruch. Eso me parece grave y desde ya comprometo que nuestra Facultad de Derecho hará una análisis de la constitucionalidad de la decisión, porque una vez más tenemos alumnos de primera y segunda clase”, dijo.
En la misma línea reaccionó Federico Valdés al frente de la Universidad del Desarrollo “Estoy de acuerdo con lo que plantea el padre Montes (…) Cualquier política pública basada en discriminación, es arbitraria”, afirmó. “No es ningún misterio que el Cruch tiene una llegada muy cercana con todos los gobiernos y que ahí defienden sus intereses. El resultado está a la vista: el Cruch funciona en el mismo edificio del Mineduc. Lo malo es que eso al final perjudica a los estudiantes que están fiera de esas universidades, los más pobres y la mayoría”, agregó.
Con algunos matices se expresó el rector de la Universidad Diego Portales, quien lo consideró como un hecho inevitable. “A mí me parece inevitable que haya comenzado por el Cruch, simplemente por la siguiente razón: si bien es verdad que estudiantes de los primeros quintiles también asisten a las universidades privadas creadas luego de 1981 —una de las cuales yo dirijo— y si bien es injusto que a esos estudiantes se les deje sin gratuidad, resulta hasta cierto punto inevitable que las universidades creadas después de 1981 son universidades que han dado motivos más que suficientes para desconfiar”, dijo Peña a Radio Zero. “No es cosa de que a estas universidades, sin escrutinio previo, le demos gratuidad, no parece razonable. Puesto el ministro en la disyuntiva de favorecer, por razones presupuestarias entre otras, tuvo que priorizar a las universidades del Cruch. Tiene algún sentido”, agregó.
EYZAGUIRRE
El ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, justificó la decisión del gobierno de comenzar la gratuidad de la educación superior por las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores (CRUCh) el 2016.
El secretario de Estado aseguró que como no estarán disponibles todos los recursos de la reforma tributaria el próximo año, se decidió comenzar por estos establecimientos que cumplen con una serie de condiciones que no tienen las privadas, en cuanto a la transparencia y a los aranceles.
En ese sentido, dijo que en los planteles del Consejo de Rectores los aranceles reales son más parecidos a los de referencia, que son fijados por el Ministerio de Educación para entregar becas y créditos.
“En el caso de las universidades estatales, yo creo que hay poca duda: Son controladas, no tienen lucro, tienen aranceles bastante parecidos a los de referencia, tienen a la Contraloría encima y son un deber para el Estado, porque en la mayoría de los países el Estado financia sólo a las estatales”, sostuvo Eyzaguirre.
“Creemos en la provisión mixta (de la educación) y quisimos dar una señal: incluimos al G9 (las privadas del CRUCh). ¿Por qué esas privadas y no otras? Porque el arancel efectivo que cobran es, en promedio, $700 mil arriba del arancel de referencia. Pero en las privadas fuera del CRUCh la brecha a cubrir es mucho más alta”, explicó el titular del Mineduc.
“Ninguna ha tenido problemas de investigación por eventual lucro o por falta de sustentabilidad de sus carreras, y no tienen esta figura de las sociedades espejo, que muchas universidades privadas todavía tienen. Muchas de estas universidades (privadas) son empresas inmobiliarias“, reparó el ministro.
Consultado por las declaraciones del rector de la Universidad Alberto Hurtado, Fernando Montes, quien dijo estar “muy dolido” por la medida adoptada por el gobierno por cuanto deja fuera al establecimiento que dirige.
“El dolor es mutuo; él está dolido con lo que nosotros hicimos y yo estoy dolido con sus opiniones. Los temas personales los converso con él directamente”, concluyó.
Montes contestó más tarde el emplazamiento. “Yo le diría (a Eyzaguirre) que tampoco tengo lucro, no he cobrado disparates y estoy excluido, habiendo aceptado entrar con todas esas universidades al sistema de admisión vía PSU. Acepté el contrato, me sometí y ahora me cambian las reglas”, sostuvo en Emol.
“Resulta que hay muchas universidades del CRUCh que cobran más caro que yo; la Católica, la Chile cobran en muchas carreras más caro que yo“, destacó la autoridad académica.
“De haber universidades que lucren, castíguenlas, revísenlas, pero no pueden castigar a las que, habiendo aceptado un sistema de admisión, que tienen todos los elementos transparentes, son excluidas”, prosiguió.
“Dígannos las condiciones, qué quieren que demostremos, que mostremos las cuentas para que vean que no tenemos lucro. Que nos pongan todas las condiciones que quieran, pero ojalá que si me las ponen a mí, que se las pongan a todas las otras universidades”, puso énfasis Fernando Montes.


