“El Santo Padre podría tratar de convencer al Gobierno boliviano a cesar la agresividad permanente contra Chile y sus autoridades”, dijo la noche del miércoles el cancillerHeraldo Muñoz.
“Lo que Bolivia pretende es afectar la integridad territorial de Chile y eso no es aceptable, como bien sabe el Papa Francisco”, manifestó el jefe de la diplomacia chilena.
La declaración del canciller Muñoz tuvo lugar después de que Francisco, de visita en Bolivia, instara el miércoles a usar un diálogo “franco y abierto” para “evitar conflictos con los países hermanos”, y citara el problema de la salida al mar que Bolivia pide a Chile.
“Estoy pensando en el mar. Diálogo, diálogo”, dijo Jorge Bergoglio en su discurso a la sociedad civil en la catedral de La Paz, en la segunda etapa de su viaje por Latinoamérica.
TEMA BILATERAL
Al respecto, el canciller replicó desde Santiago que “Chile ha estado siempre abierto al diálogo”e insistió en que “fue Bolivia quien lo frustró con su demanda unilateral ante la Corte”.
En sus declaraciones, Muñoz puntualizó: “no nos hemos negado al diálogo, pero no podemos aceptar que se presente como un diálogo lo que no es más que una demanda con un solo resultado posible que viola un tratado válido y vigente”.
“Como ha dicho el Vaticano se requiere avanzar a una integración de siglo XXI y no quedarse, como Bolivia, en el siglo XIX. Por último, lo que el Papa está diciendo es que este es un tema bilateral”, concluyó el representante de la diplomacia chilena.
PUENTES EN VEZ DE MUROS
Las declaraciones del Papa Francisco tuvieron lugar en el marco del discurso que dirigió a la sociedad civil en la catedral de la Paz, en su primer día de estancia en Bolivia, adonde llegó procedente de Ecuador y antes de concluir en Paraguay su primera gira latinoamericana como jefe de la Iglesia católica.
Poco después de llegar a La Paz, donde se reunión con el Presidente Evo Morales y la curia boliviana, tras rendir homenaje a un sacerdote jesuita asesinado por paramilitares hace 35 años, el Pontífice instó, sin mencionarlos, a los gobiernos de La Paz y Santiago a allanarse hasta encontrar una solución pacífica y equitativa a su secular desencuentro marítimo.
“Construir puentes en vez de levantar muros; todos los temas, por más espinosos que sean, tienen soluciones razonables, equitativas y duraderas y en todo caso nunca han de ser motivo de agresividad, rencor o enemistad que agravan más la situación y hacen más difícil su resolución”, afirmó el Santo Padre.
CARLOS MESA


