El Gobierno de Bolivia, liderado por el presidente Rodrigo Paz, restableció formalmente sus relaciones diplomáticas con Israel. Los ministros de Exteriores, el boliviano Fernando Aramayo, y el israelí Gideon Sa’ar, oficializaron el acuerdo con una firma en la residencia del embajador israelí en Washington.
El ministro israelí Sa’ar declaró que se pone fin a un «capítulo largo e innecesario de separación» entre ambas naciones. Ambos países acordaron un «restablecimiento total» que incluye la próxima designación de embajadores en La Paz y Tel Aviv, lo que formalizará el vínculo binacional.
El canciller Aramayo aseguró que el nuevo Gobierno boliviano es «consciente» de los desafíos que enfrenta y que, para abordarlos, «necesita de los amigos correctos», en clara alusión a Israel. El canciller boliviano también animó a los ciudadanos israelíes a visitar Bolivia, país que ya no les requiere visa.
La ruptura de relaciones fue ordenada en octubre de 2023 por el gobierno anterior, liderado por Luis Arce, en «repudio» a la ofensiva militar israelí sobre Gaza. Con el nuevo mandato, que terminó con veinte años de gobiernos de izquierda, el presidente Paz busca priorizar las relaciones con naciones «que tengan la democracia como principio».
Un día después de la elección de Paz, el ministro Sa’ar había conversado con él para manifestar el deseo de abrir un «nuevo capítulo». En este marco, el Gobierno boliviano ya había retirado el requisito de visa a los visitantes israelíes, una medida que databa del año 2014. (NP-Gemini-Cancillerías de Bolivia e Israel-La Tercera EFE)
