Los cuatro involucrados en un atentado incendiario en Quilicura a la empresa de Carnes Susaron, mantenían un historial de desórdenes públicos, amenazas simples, daños calificados, usurpación violenta, hurto simple, utilización de artefactos explosivos y químicos incendiarios (molotov), entre otros.
Según un informe de la Policía de Investigaciones (PDI), el ataque fue premeditado, incluso con panfletos que decían: «Hoy atacamos esta empresa en su infraestructura, mañana será a sus dueños y colaboradores de cualquier tipo. Para todos ellos pronosticamos plomo y esquirlas. Liberación animal sin consideraciones con quien se cruce por delante».
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