El partido en formación, “Amarillos” hizo un llamado “a los chilenos y chilenas que comparten la salvaguarda de la democracia, del buen gobierno y buena institucionalidad” a “construir una alternativa que le de gobernabilidad y esperanza a nuestro país ayudándonos a ser partido, y afiliándose a la nueva organización política.
En una declaración pública, la directiva de “Amarillos” advierte que “Pese al triunfo del 4 de septiembre de 2022 nuestro país sigue amenazado por ideas refundacionales, facilismo e irresponsabilidad populistas e ideas totalitarias de extrema derecha e izquierda”, señalando que “levantamos una alerta democrática sobre ese peligro y nos comprometemos, tal como lo hicimos hace un año cuando nacimos como movimiento ciudadano, a cuidar y salvaguardar a nuestra democracia. Hoy más que nunca necesitamos una nueva y buena constitución”.
La nota indica que “hemos visto con preocupación como la posibilidad de articular un espacio político de centroizquierda democrática se ha debilitado, con la decisión del Partido Socialista de privilegiar una alianza política con el Partido Comunista y el Frente Amplio, dándole la espalda a su propia historia, a la “renovación socialista” que permitió la exitosa transición a la democracia desde la dictadura”.
Afirman “que el país necesita alejarse de los extremos, cuidar las instituciones democráticas y retomar una senda de desarrollo económico y social que le devuelva la esperanza a millones de chilenos que hoy tienen miedo y desconfianza en su propio futuro” agregando que la decisión del PS “nos parece (…) un error político y estratégico mayúsculo” al tiempo que destacan “el temple de Natalia Piergentilli, presidenta del PPD; quien, resistiendo un sinnúmero de presiones del gobierno y de sus ex–compañeros de ruta, ha privilegiado la apuesta por fortalecer una alternativa de verdadera centroizquierda, y no volver a ser el vagón de cola de una izquierda maximalista y refundacional”.
Asimismo celebran “la decisión de Gloria Hutt y de su partido de resistir la tentación de unirse a sectores extremos de la derecha. Ese coraje y claridad es el que necesita la política con urgencia hoy. Estas señales de claridad y coraje políticos abren una puerta a la esperanza”.
Junto con reiterar que la organización no participará de las elecciones de consejeros constituyentes sino aportando ideas, aplausos y alertas, hacen un llamado a “la clase dirigente -y en primer lugar, el gobierno- a entregar respuestas contundentes a los graves problemas que nos aquejan como sociedad (delincuencia, inmigración y violencia en el norte, precariedad económica, crisis medio ambiental, largas listas de espera en salud, etc.) y “a cerrar el capítulo constitucional y tener una Constitución que nos una como sociedad. Esperamos que los candidatos a constituyentes no defrauden al pueblo de Chile y demuestren altura, visión y seriedad en su histórica tarea”.
