Canciller Merkel elogia apertura económica de Argentina

Canciller Merkel elogia apertura económica de Argentina

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La canciller alemana, Angela Merkel, fue recibida hoy por el presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada de Buenos Aires en su primera visita oficial a la Argentina, donde elogió la apertura económica y aseguró que Alemania puede ser «un buen socio» para la modernización del país sudamericano. Merkel saludó los «grandes avances» en las negociaciones de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur, como también las reformas que aplicó el presidente Macri desde su asunción en diciembre de 2015 para la apertura financiera de la nación sudamericana, días después de cuestionar el proteccionismo que Donald Trump propone desde la Casa Blanca.

La jefa de Gobierno alemana ideó esta gira por Argentina y México para buscar consenso en temas clave como medio ambiente, migración y comercio de cara a la próxima cumbre del G20 en julio en Hamburgo, tras las recientes desavenencias con Trump. Merkel y Macri coordinarán asimismo el traspaso de la presidencia del G20 que en 2018 asumirá Argentina, con el fin de garantizar que se mantenga la línea del influyente foro internacional, más allá de la resistencia que puedan presentar algunos integrantes.

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Merkel en la sinagoga de la calle Libertad. Agradeció a Argentina por recibir a judíos que escapaban del nazismo. Entre ellos, mi abuelo

«Mi primera visita como canciller tiene lugar en un momento en que el presidente Macri ha generado la reapertura del país a los mercados financieros después de un largo período en el que no tuvo acceso», declaró Merkel tras una reunión con ejecutivos de empresas alemanas en un lujoso hotel de Buenos Aires. «Argentina tiene nuevamente acceso a los mercados financieros y eso se observa en la disposición del presidente a asumir la presidencia del G20 y también en el hecho de que se realizará aquí en Buenos Aires la reunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC) a fines de año», agregó.

«Creemos que además de las conversaciones políticas, podemos acompañar los desarrollos económicos. Argentina necesita infraestructura, Argentina debe modernizarse y para ello Alemania puede ser un buen socio», destacó la canciller. Merkel aseguró estar «muy contenta» de que «después de muchos años de estancamiento las negociaciones comerciales entre la Unión Europea y el Mercosur han hecho grandes avances».

«Tengo muchas expectativas acerca de las conversaciones que tendré aquí para fortalecer nuestra cooperación con América Latina», sostuvo la dirigente alemana. La canciller visitó luego la sinagoga de la Congregación Israelita de la República Argentina, conocida como el templo Libertad, al que consideró «un puente entre Argentina y Alemania». El Gobierno alemán colaboró en la restauración del órgano Walcker que había donado en 1933. Más tarde realizó la tradicional ofrenda al Libertador general José de San Martín y recibió las llaves de la ciudad de Buenos Aires.

APOYO A MERCOSUR

Merkel, aseguró que va a apoyar «de forma intensa» las negociaciones de la Unión Europea para llegar a un acuerdo de integración con el Mercosur, en una rueda de prensa realizada en Buenos Aires tras reunirse con su par argentino, Mauricio Macri.

«Tenemos la posibilidad a nivel bilateral en la Unión Europea y los Estados del Mercosur de concluir un acuerdo y Alemania ratifica el deseo de Argentina de alcanzar rápido progresos en este sentido», apuntó la mandataria.

PRÓXIMO G20

La canciller alemana, Angela Merkel, remarcó  en Buenos Aires que se intentará lograr el «máximo» de «puntos en común» durante la próxima cumbre del G20 de Hamburgo, después de que Estados Unidos decidiera, durante la última cumbre del G7, no ratificar el Acuerdo de París por el cambio climático.

En una rueda de prensa junto a su par argentino, Mauricio Macri, la mandataria alemana recordó que «en estos momentos» se está preparando la reunión del grupo de los 20, que se celebrará el próximo mes, y negociando comunicados con los participantes, ya que «se hará por unanimidad».

LLAMADO POR VENEZUELA

La canciller alemana llamó a los países de América Latina a no dejar de hacer esfuerzos para alcanzar una «solución pacífica» para la crisis que atraviesa Venezuela, durante una conferencia ante jóvenes estudiantes y científicos celebrada en Buenos Aires.

«Muchas personas están sufriendo por la desastrosa situación de desabastecimiento en un país con muchos recursos», lamentó la canciller, especialmente por las «decenas» de muertos registradas en las protestas en las calles venezolanas.

«Quiero alentar a los países de esta región a no cejar en sus esfuerzos para llegar a una solución pacífica en Venezuela», instó.

EN MÉXICO

Los motivos oficiales para este viaje de Angela Merkel a México no son espectaculares: el cierre del año dual México-Alemania, la preparación de la próxima presidencia en el G20 y la agenda comercial y empresarial habitual. Pero tras los recientes movimientos en las relaciones entre EE.UU. y la Unión Europea, esta visita gana un simbolismo especial. Algo que se registra claramente al leer los comentarios en los medios mexicanos.

Tomando en cuenta que Angela Merkel hizo su ya famoso comentario sobre los aliados que «se han vuelto menos fiables» en una fiesta de cerveza, el diario El Universal toma la oportunidad de bautizar el desencanto expresado sobre Donald Trump como la «doctrina de la cerveza» de Angela Merkel. El discurso del 28 de mayo, poco después del desastroso encuentro entre los líderes europeos y Trump en Taormina, es interpretado por este periódico mexicano como «más Alemania, más Europa, menos Estados Unidos».

«DEFENSORA DEL MULTILATERALISMO»

El editorialista de El Economista elogia rotundamente a Merkel: «A partir de la abdicación del liderazgo de Estados Unidos con su neoproteccionismo comercial y la renuncia a enfrentarse con políticas coordinadas al cambio climático, olvidarse de los refugiados, de la democracia liberal y de una visión cosmopolita, Angela Merkel emergió como defensora del multilateralismo y la cooperación, en el contexto de una ética responsable».

G7-Gipfel in Sizilien (picture-alliance/dpa/AP/E. Vucci)Justin Trudeau, Angela Merkel y Donald Trump en Taormina (Italia)

El editorialista del Excelsior también ve a Angela Merkel como una especie de antiTrump: «Fantástico observar cómo Alemania aprendió la lección de haber vivido bajo el yugo de un liderazgo demagogo y totalitario. Ver cómo reciben a los refugiados sirios. O las declaraciones de Merkel el día que ganó Trump las elecciones […] O su bonhomía frente a la patanería de Trump de no querer estrecharle la mano en la Oficina Oval. O su paciencia frente a las provocaciones proteccionistas».

AYUDA BIENVENIDA CONTRA TRUMP

Bajo el título «Lo bueno de Trump», el mismo comentarista detecta el «surgimiento de un liderazgo colectivo de políticos que sí creen en los valores de la democracia-liberal»: Angela Merkel, Emmanuel Macron, Justin Trudeau y el nuevo primer ministro de Irlanda Leo Varadkar, de 37 años, hijo de inmigrantes indios y abiertamente homosexual. «Merkel, Macron, Trudeau y ahora Varadkar son una bocanada de oxígeno en estas épocas de demagogia, xenofobia, racismo y aislacionismo representada por Trump».

La autora de un extenso análisis en la página web de la revista Life and Style, en cambio, resume el sentimiento de muchos editoriales en México: «Su presencia en el país supone en respiro generalizado y se mira como una especie de rayo de esperanza ante el incierto panorama de México tras la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos». (DW, efe, Clarín)

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