El ministro de Justicia de Bolivia, Héctor Arce, solicitó éste viernes que se otorgue la libertad a sus nueve compatriotas que fueron detenidos hace 50 días en Colchane, y que fueron imputados por los delitos de robo con intimidación, porte ilegal de armas y cruce ilegal de la frontera.
De acuerdo a los antecedentes del Ministerio Público, durante la mañana del domingo 19 de marzo en el sector de Tulapampa, los imputados –dos militares y nueve funcionarios de Aduanas de ese país- habrían comenzaron a disparar a un camión chileno, obligando al conductor y al copiloto a descender y entregar las llaves mientras eran intimidados con armas de fuego.
Al respecto, el titular del vecino país reiteró que los cargos impuestos por fiscalía a sus conciudadanos son «absurdos» y se trata de «un tema que nunca debió haber sido judicializado, se debería haber solucionado por la vía diplomática (…) es un acto de revancha que ni en la Edad Media se veía, satanizar a personas inocentes».
«Ellos están siendo juzgados por robo con intimidación, contrabando y porte ilegal de armas y después del análisis jurídico no existen ninguno de estos delitos (…) los funcionarios habían informado de sus movimientos a sus superiores, hecho que fue expuesto a los tribunales chilenos», aseguró la autoridad.
Al respecto, indicó que el proceso «nunca debió haber llegado a tribunales» y que debió ser solucionado «por la vía diplomática», agregando que seguirán trabajando por esa línea. «Hacemos un llamado respetuoso a las autoridades chilena a que se vuelva encausar este caso por vía diplomática. Este es un tema del Estado boliviano en relación con el Estado chileno, no estamos hablando de delincuentes. No son particulares, son oficiales del Ejército», remarcó.
Arce culminará hoy viernes la gira que realizó a nuestro país con el objetivo de visitar a los nueve bolivianos en prisión preventiva desde el 19 de marzo, luego que personal de Carabineros los detuviera en un confuso incidente en el combate contra el contrabando. (Emol)


