Cada quince días, algunos integrantes de las directivas del PC y el PRO se reúnen. Sus encuentros comenzaron a mediados de noviembre, y desde entonces han mantenido un diálogo fluido.
En las reuniones, las colectividades han abordado sus coincidencias programáticas, y también la posibilidad de llegar a un acuerdo parlamentario. La idea ha cobrado fuerza por estos días tras conocerse el voto político de la última Junta Nacional de la DC del sábado pasado, donde ratificaron su deseo de competir en dos litas parlamentarias en las elecciones de noviembre próximo.
El PC ha defendido la idea de ir en solo una lista parlamentaria: la fórmula es la electoralmente más eficiente para el partido, que actualmente cuenta con seis diputados. El escenario que abrió la DC, que además ha rechazado cualquier acercamiento con el partido que lidera Marco Enríquez-Ominami, ha hecho que entre los comunistas haya crecido la convicción de sumar al PRO.
«El Partido Comunista ha estado en conversaciones con el PRO, y ambos partidos hemos visto la posibilidad de unir nuestras fuerzas en la campaña parlamentaria», aseguró al respecto el presidente del PC, diputado Guillermo Teillier.
POLO DE IZQUIERDA
En ambas colectividades reconocen que las tratativas responden a la necesidad de potenciar un «polo de izquierda» tras el surgimiento de otras fuerzas, como el Frente Amplio. El bloque, que incluye a los diputados Giorgio Jackson (RD) y Gabriel Boric (Movimiento Autononista), amenazará a los comunistas en buena parte de los distritos en que actualmente cuenten con un parlamentario.
Juan Andrés Lagos, miembro de la comisión política del PC, es quien en reiteradas ocasiones se ha reunido con el PRO, y explicó que «la idea es hacer un acuerdo táctico y sumar a la lista en que esté el Partido Comunista al PRO. Para el PC es importante fortalecer la izquierda por el Frente Amplio».
El presidente del PRO, Camilo Lagos, aseguró que «un acuerdo del PRO con el PC permite construir un polo de izquierda progresista para el siglo XXI. El PRO no va a entrar a la Nueva Mayoría, pero sí está disponible para trabajar con generosidad y construir un nueva espacio político social de la izquierda y centroizquierda».
La idea del PC, además, es respaldada por otras colectividades de la Nueva Mayoría, como la IC y el MAS. «Si vamos en dos listas, la eficiencia electoral se recupera incorporando nuevas fuerzas políticas, y en este escenario el PRO es un buen actor», comentó el presidente de la IC, Francisco Parraguez.
«Yo estoy en la línea de privilegiar la unidad de la Nueva Mayoría; sin embargo, mientras más amplia sea esta Nueva Mayoría, mejor, y con ello fortalecer la alianza de centroizquierda», agregó el secretario general del MAS, Fernando Zamorano.
APOYO PRESIDENCIAL
Tanto en el PC como en el PRO, no obstante, aseguraron que el eventual acuerdo parlamentario no conllevaría un amarre presidencial. El PRO ya ha ratificado que su abanderado será Enríquez-Ominami y en el PC ha crecido la convicción de entregar su respaldo al senador independiente Alejandro Guillier.
«Esto no significa que el PRO vaya a cambiar su perspectiva presidencial ni que nosotros nos vayamos a salir de la Nueva Mayoría o que tengamos que también no tener plena independencia para tomar nuestras decisiones sobre la carta presidencial, pero al discutir nuestros objetivos programáticos nos damos cuenta de que tenemos bastante en común y que sería muy bueno potenciar todos esos acuerdos programáticos», afirmó Teillier.
De todas maneras, Juan Andrés Lagos señaló que un posible pacto parlamentario puede «tener un efecto presidencial en la segunda vuelta».
13:00 Horas de hoy, los presidentes y secretarios generales de la Nueva Mayoría se reunirán en el Senado para abordar la negociación parlamentaria. (El Mercurio)


