Expertos analizan el destino de la excandidata presidencial tras la derrota electoral, advirtiendo que su rol definitivo se definirá cuando el oficialismo deje La Moneda. Analistas prevén disputas internas entre el Socialismo Democrático, el Frente Amplio y el PC.
Mario Herrera, académico de la Universidad de Talca, sostiene que la coalición enfrenta dos caminos: culparse mutuamente por el fracaso o unirse pragmáticamente. Según el docente, Jeannette Jara podría emerger como un liderazgo renovado o ser el chivo expiatorio.
Para Marco Moreno, de la Universidad Central, el ciclo político de la exministra no ha terminado, pero requiere una profunda redefinición estratégica. El desafío de Jara será decidir si lidera un repliegue identitario o construye una oposición de mayoría.
Tomás Duval, de la Universidad Autónoma, advierte que las recientes declaraciones de Lautaro Carmona dejan a la exabanderada en un complejo limbo político. El presidente del Partido Comunista descartó responsabilidades institucionales en el diseño del comando y el programa.
Carmona enfatizó que la conducción de la campaña fue una síntesis de nueve partidos y no una expresión exclusiva del comunismo chileno. Aseguró que el PC llegó con su propia identidad a las primarias y cumplió con su rol histórico.
Respecto al futuro de Jara en la colectividad, el dirigente aclaró que las estructuras internas no funcionan bajo una lógica de liderazgos de masas. Afirmó que los espacios dirigenciales los define el Congreso del partido y no decretos externos.
La colectividad iniciará un proceso de intercambio natural para evaluar el papel de interrelación que jugará la exministra con el mundo de centroizquierda. Sin embargo, el hermetismo de la directiva siembra dudas sobre su relevancia en el reordenamiento opositor.
El analista Pedro Cayuqueo por su parte aconseja a Jara que «salga del PC y refunde el Partido Democrático (1887-1927) el partido donde militó inicialmente Recabatrren, el partido de Malaquías Concha, los diputados Melivilu, Huenchullán y tantos otros».
PAREJA DE JARA
Claudio Rodríguez, pareja de la exministra, publicó una columna donde califica la victoria de José Antonio Kast como un triunfo indiscutible de la ultraderecha. El analista destacó que el discurso republicano se enfocó con éxito en seguridad, migración y crecimiento.
En su escrito, Rodríguez resaltó la claridad estratégica del mandatario electo y su capacidad para mantener una línea discursiva coherente durante toda la campaña. También apuntó a la decisión del candidato de evitar espacios que expusieran sus debilidades personales.
El autor mencionó que la candidatura de Jara enfrentó el complejo costo de representar la continuidad de un gobierno con baja evaluación ciudadana. Este factor fue aprovechado por la oposición para movilizar a un electorado crítico con la gestión actual.
Rodríguez analizó cómo el discurso de Kast logró sintonizar con las preocupaciones urgentes de los chilenos, dejando poco margen de acción al bloque oficialista. La derrota obligaría ahora a una profunda revisión de las estrategias de comunicación del sector.
Mientras se procesan estas reflexiones, el oficialismo confirmó un cónclave para enero donde se buscará reordenar las fuerzas tras el desenlace presidencial. En dicha instancia participarán autoridades de gobierno y figuras de la fundación ligada a Michelle Bachelet.
La columna de Rodríguez se suma a las diversas interpretaciones que circulan en la izquierda sobre el fracaso electoral del pasado domingo 14 de diciembre. El texto enfatiza que la derecha logró capitalizar el descontento social de manera efectiva.
Finalmente, el análisis sugiere que la falta de empatía atribuida al líder republicano no fue barrera suficiente para frenar su avance en las urnas. La claridad en los mensajes sobre orden público habría sido el motor principal de su victoria. (NP-Gemini-Emol)
