Hasta la semana pasada, el senador Manuel José Ossandón figuraba como el favorito para liderar el Senado en el nuevo periodo legislativo. Sin embargo, su decisión de congelar un concurso público para el jefe de comunicaciones tensionó sus alianzas.
La anulación del proceso afectó a candidatos vinculados al Partido Socialista, lo que generó duras críticas de senadores como Fidel Espinoza y Juan Luis Castro. Los parlamentarios calificaron la medida como arbitraria e impropia para la institucionalidad.
Ossandón justificó su acción argumentando un plan de austeridad frente a los elevados sueldos en el Congreso. No obstante, sectores de derecha ven en este conflicto una oportunidad para bloquear su continuidad y proponer nombres de la UDI.
Entre las alternativas de la oposición surgen los senadores Javier Macaya e Iván Moreira para ocupar la testera. Incluso se baraja la posibilidad de ceder el cargo a un legislador del PPD o el PS para buscar gobernabilidad.
A pesar de los roces, el actual presidente del Senado mantiene una comunicación fluida con el mandatario electo, José Antonio Kast. Ambos han coincidido en la importancia de mantener un clima de entendimiento entre el Ejecutivo y el Congreso.
Renovación Nacional seguirá siendo la bancada más numerosa, lo que le otorga una ventaja numérica en la negociación. Además de Ossandón, la senadora Paulina Núñez asoma como una carta fuerte dentro de las filas de su partido.
El escenario final se resolverá antes del 11 de marzo de 2026, fecha en que parte el nuevo ciclo. La definición de la presidencia será clave para el inicio de la administración de Kast y el equilibrio de las fuerzas políticas.
