Un fuerte impasse se desató en las filas del Partido Socialista (PS) entre el diputado Daniel Manouchehri y el senador Fidel Espinoza, generando una tensión que escaló hasta provocar la salida del senador Tomás de Rementería del grupo de WhatsApp de la bancada de diputados.
El conflicto se originó el lunes por la noche durante un receso de la sesión por la acusación constitucional contra el exministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Antonio Ulloa. El senador Espinoza anunció que presentaría una querella por injurias contra Manouchehri, quien le gritó «corrupto» en la sala de la Cámara Alta, a raíz de un cruce que el diputado tuvo previamente con la senadora Yasna Provoste (DC).
Respaldo de la Bancada y Quiebre Interno: La bancada de senadores del PS reaccionó rápidamente, emitiendo una declaración pública en respaldo a Espinoza, en la que calificaron las palabras de Manouchehri como «graves» y «alejadas del principio de objetividad».
Esta declaración llegó al grupo de WhatsApp de los diputados socialistas. En medio de los cuestionamientos de varios diputados a la postura de los senadores, Manouchehri reaccionó con un mensaje dirigido a Tomás de Rementería, quien formaba parte del chat a pesar de haber asumido como senador en abril: «Por lo demás, pido que se saque de este grupo a Tomás de Rementería. Él no es diputado», exigió.
De Rementería, quien mantiene estrecha cercanía con la bancada de diputados y es candidato a volver a la Cámara, no tardó en responder. Aseguró que no fue parte de la redacción del comunicado de los senadores y se retiró del grupo con un breve «No es necesario, me salgo solo».
El conflicto se extendió a las redes sociales, donde el senador Espinoza publicó esta mañana en X, fustigando a Manouchehri y a la diputada Daniella Cicardini: «(Manouchehri y Daniella Cicardini) no solo dañan la democracia. Actuan con una bajeza inusitada, sin escrúpulos. Se creen mesiánicos, pero son irresponsables en su actuar y dañinos contra quienes se oponen a su forma de hacer política».
