El ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, realizará una visita de emergencia a la Región de La Araucanía este lunes para abordar la reciente escalada de violencia, marcada por una seguidilla de ataques incendiarios registrados en menos de 72 horas. La visita, según información recabada por La Tercera, tiene como objetivo principal revisar e implementar medidas de seguridad concretas frente a la ola de atentados.
El jefe de la cartera no se desplazará solo; irá acompañado de los jefes de inteligencia de Carabineros y de la Policía de Investigaciones (PDI), destacando la necesidad de una respuesta coordinada de alto nivel. Además, Cordero tiene previsto reunirse con diversas autoridades regionales, incluyendo al Jefe de Defensa Nacional (Jedena) de La Araucanía, Alejandro Moreno.
La situación de seguridad en la región se deterioró drásticamente en los últimos días con la ocurrencia de cuatro ataques incendiarios. El primero, un doble atentado, se registró la madrugada del viernes en la comuna de Vilcún, donde una casa patronal y un galpón con maquinaria y productos agrícolas resultaron totalmente destruidos en el fundo Traipo. En el lugar fueron hallados lienzos alusivos a demandas mapuches.
Posteriormente, durante la madrugada del sábado, se perpetró el tercer ataque en el sector Cullinco Bajo de Carahue, donde maquinaria resultó quemada en las orillas de la ruta que conecta Carahue con Nehuentúe. Carabineros se encuentra realizando diligencias en la zona tras encontrar un lienzo firmado por la organización radical Weichan Auka Mapu (WAM).
El domingo se sumó un cuarto incidente en un predio en Cunco, donde siete máquinas forestales fueron consumidas por las llamas. El comisario Héctor Bravo de la BIPE de la PDI confirmó el hallazgo de «lienzos alusivos a la violencia rural» en el sitio del suceso.
Tras la seguidilla de hechos, las autoridades regionales activaron un comité policial de emergencia. El seremi de Seguridad Pública, Israel Campusano, si bien confirmó que no hubo lesionados, expresó la «inquietud» del Gobierno ante la reiteración de los ataques, asegurando que es una situación que «sí nos ocupa». Campusano destacó que la acción conjunta de la PDI, Carabineros y el Ministerio Público ha logrado generar «altas condenas» en el pasado.
El seremi sostuvo que la reaparición de adjudicaciones de atentados y la violencia en general son una reacción a dichos fallos judiciales. Concluyó que los ataques buscan «presionar a las instituciones para que no sigan adelante» con las investigaciones y procesos judiciales, pero enfatizó que «eso no va a ocurrir».
La escalada de violencia también desató una oleada de críticas desde el mundo político hacia la gestión del ministro Cordero y del Gobierno. El jefe de bancada de la UDI, Henry Leal, cuestionó duramente la «incompetencia» e «indolencia» del ministro por su supuesta falta de acción y de reuniones con las víctimas.
En la misma línea, el diputado republicano Stephan Schubert lamentó la «pasividad por parte de la autoridad», sugiriendo que el Gobierno «está haciendo las maletas» y no está ocupado de gobernar. Finalmente, el diputado de Renovación Nacional, Jorge Rathgeb, condenó la falta de una declaración pública de las autoridades frente a los episodios, exigiendo que se sancione «drásticamente a los responsables» y se persiga a quienes instigan estos hechos que afectan a toda la región. (NP-Gemini-La Tercera)
