El Gobierno se prepara para presentar a más tardar el 30 de septiembre el proyecto de Ley de Presupuesto 2026, que definirá los recursos con los que contará la próxima administración. Será la primera gran prueba política y técnica del ministro de Hacienda, Nicolás Grau, quien asumió hace poco más de un mes tras la salida de Mario Marcel, recordado por su mayor cercanía con el Congreso.
Grau confirmó que el erario incluirá una reducción de recursos para las gobernaciones regionales y ajustes en distintos ministerios, lo que anticipa tensas negociaciones con los parlamentarios. El debate se dará además en medio de un año electoral, lo que eleva la presión sobre el Ejecutivo y ya genera roces incluso antes de que el proyecto ingrese oficialmente al Congreso.
En este escenario, la candidata presidencial de Chile Vamos y Demócratas, Evelyn Matthei, advirtió que no se tramitará la iniciativa si el Gobierno no transparenta las deudas pendientes. Acusó que existen indicios de pagos postergados para la próxima administración y denunció reclamos de regiones donde las obras están concluidas pero no se permite su facturación. “No se aprobará ninguna Ley de Presupuesto este año si no se aclaran estas situaciones”, señaló.
Uno de los puntos más sensibles será la llamada “glosa republicana”, provisión de libre disposición que tradicionalmente queda para el gobierno entrante y que le otorga flexibilidad financiera. Grau reconoció que el Ejecutivo evalúa cómo manejarla, considerando que se trata de un debate en víspera electoral.
Según explicó, la comisión asesora propuso no dejar fondos específicos, pero sí mecanismos de flexibilidad para la próxima administración. «Es una propuesta interesante que estamos estudiando», indicó, asegurando que el presupuesto combinará “responsabilidad social con responsabilidad fiscal”, sello que —dijo— ha caracterizado a la actual gestión.
El ministro recordó que el proyecto tendrá un periodo de análisis legislativo entre el 30 de septiembre y el 30 de noviembre, dando margen para un debate en profundidad. Sin embargo, el antecedente del expresidente Sebastián Piñera, que en 2021 dejó US$678 millones de libre disposición al gobierno de Gabriel Boric, presiona al Ejecutivo a definir con claridad su postura sobre esta glosa.
En definitiva, el Presupuesto 2026 se perfila como un pulso político marcado por la desconfianza de la oposición, las tensiones con autoridades regionales y las expectativas de continuidad en la disciplina fiscal, todo en un contexto electoral que anticipa una discusión especialmente compleja.
El siguiente cuadro muestra lo que dejó cada gobierno desde 2006 hasta 2022, expresados en millones de dólares, según datos de la Facultad de Economía, Negocios y Gobierno de la USS basados en información oficial de Dipres:
| Gobierno Entrante | Año Debate | Presentado por | Ejecutado por | Recursos Glosa Republicana (millones US$) | % Presupuesto Aprobado |
|---|---|---|---|---|---|
| Bachelet I | 2005 | Lagos | Bachelet I | 287 | 0,8% |
| Piñera I | 2009 | Bachelet I | Piñera I | 494 | 0,7% |
| Bachelet II | 2013 | Piñera I | Bachelet II | 550 | 0,6% |
| Piñera II | 2017 | Bachelet II | Piñera II | 781 | 0,7% |
| Boric | 2021 | Piñera II | Boric | 678 | 0,6% |
En resumen, los montos han fluctuado entre 287 millones de dólares en 2005 y un máximo de 781 millones en 2017. La glosa suele representar entre 0,6% y 0,8% del presupuesto aprobado anualmente. (NP-Perplexity-Emol)
